Una serie a la que me he aficionado últimamente, y una comedia ligera de capítulos cortitos (20 minutos) con la que me río bastante, y que algunos comparan con la exitosa Friends, aunque al no haberla visto no puedo entrar en la comparación.
Es el año 2030, y la voz en off del protagonista cuenta a sus hijos la historia de cómo conoció a la mujer que sería su madre, aunque les advierte de que es una larga historia (ya van por la 5ª temporada), y se remonta a 2006, cuando era casi un treintañero, con las neuras y vivencias propias de esa edad en esa época. Obviamente, a mí me resulta bastante fácil sentirme identificado con algunas de las cosas del protagonista, dado que al igual que yo... nació en abril del 78, y bueno, claro, que te cuenten un flashback de un flashback en el que te hablan de cuando comenzó en la universidad y que el año coincida con el tuyo, siempre es un valor añadido.
Pero sin necesidad de sacar mis canas a paseo, lo mejor de esta serie son sus personajes. Está Ted, el protagonista, un exitoso arquitecto, ansioso por encontrar a la mujer de sus sueños, sus amigos de toda la infancia, Lilly y Marshall, la parejita feliz y a punto de casarse (y lo del tipo grandote licenciado en Derecho me recuerda a alguien, pero no caigo), el simpar Barney Stinson, un auténtico vividor, seductor y perennemente trajedo, con sus enormes filosofías y enseñanzas, verdadero foco cómico de la serie. Y también está Robin, la atractiva periodista que en cuanto aparece en la vida de Ted él sabe que será muy especial en su vida. Pero dejemos que esto lo cuente el primer capítulo.
Es una comedia ágil, ligera, y con puntos muy buenos, personajes a los que pronto se coge cariño (sí, hasta el despreciable Barney tiene su puntito entrañable). De hecho, qué demonios, Barney Stinson es el alma de la fiesta. Él y sus frases, como "sublime", "hola, ¿conoces a Ted?" o "¡ponte traje!" forman ya parte del acervo cultural.
Y cómo no, entre las selectas teorías de Barney está la desternillante diagonal Sexy-Loca, por la cual debo admitir que me aficioné a esta serie:
Es el año 2030, y la voz en off del protagonista cuenta a sus hijos la historia de cómo conoció a la mujer que sería su madre, aunque les advierte de que es una larga historia (ya van por la 5ª temporada), y se remonta a 2006, cuando era casi un treintañero, con las neuras y vivencias propias de esa edad en esa época. Obviamente, a mí me resulta bastante fácil sentirme identificado con algunas de las cosas del protagonista, dado que al igual que yo... nació en abril del 78, y bueno, claro, que te cuenten un flashback de un flashback en el que te hablan de cuando comenzó en la universidad y que el año coincida con el tuyo, siempre es un valor añadido.
Pero sin necesidad de sacar mis canas a paseo, lo mejor de esta serie son sus personajes. Está Ted, el protagonista, un exitoso arquitecto, ansioso por encontrar a la mujer de sus sueños, sus amigos de toda la infancia, Lilly y Marshall, la parejita feliz y a punto de casarse (y lo del tipo grandote licenciado en Derecho me recuerda a alguien, pero no caigo), el simpar Barney Stinson, un auténtico vividor, seductor y perennemente trajedo, con sus enormes filosofías y enseñanzas, verdadero foco cómico de la serie. Y también está Robin, la atractiva periodista que en cuanto aparece en la vida de Ted él sabe que será muy especial en su vida. Pero dejemos que esto lo cuente el primer capítulo.
Es una comedia ágil, ligera, y con puntos muy buenos, personajes a los que pronto se coge cariño (sí, hasta el despreciable Barney tiene su puntito entrañable). De hecho, qué demonios, Barney Stinson es el alma de la fiesta. Él y sus frases, como "sublime", "hola, ¿conoces a Ted?" o "¡ponte traje!" forman ya parte del acervo cultural.
Y cómo no, entre las selectas teorías de Barney está la desternillante diagonal Sexy-Loca, por la cual debo admitir que me aficioné a esta serie:
Y bueno, siguiendo con Barney. Es un crápula, un jeta, un manipulador y una serie de lindezas, pero en el fondo es buen tipo, y lo que no es menos cierto, que a veces hay que ser un poco Barney para poder ser Ted al día siguiente, y si es posible Marshall toda la vida.
Pues si, yo también me he aficionado a esta serie. Empecé a verla porque oía buenos comentarios y (aun sin llegar a la grandeza de Big Bang Theory, que es la serie con la que más me he reído) me gusta bastante. Creo que hace un mes o asi que empecé a verla online, y ya voy por la última temporada. Me encanta eso de que sean capítulos cortos, en una hora te has visto tres :D
ResponderEliminar¿Fans de "cómo conocí" y de "Big Bang Theory"? Hmm, este blog empieza a gustarme.
ResponderEliminar"Y también está Barney, la atractiva periodista que en cuanto aparece en la vida de Ted él sabe que será muy especial para él."
ResponderEliminar¿BARNEY LA ATRACTIVA PERIODISTA? ¿Pero qué serie estás viendo tú?
Diría más, pero es muy tarde y quiero dormir... T_T
Ups, un ligero lapsus >.<
ResponderEliminarA ver si sigo con ella.
ResponderEliminarBarney es entrañable en sus dos acepciones; ya sabeis la de quererle sacar las entrañas.
Y si, por muchas y enormes que sean las diferencias con la VidaRealTM es casi imposible no sentirse identificado en casi todos los capitulos. (no veas que gracia ciertos arcos argumentales, pero me alegro por los de dentro de la serie ^^ )
Arghhhhhhhh... Ese doblaje!!!!!! Yo supongo que uno se acostumbra pero es que es que... Arghhhhhh
ResponderEliminarLa serie es tremendisima.