Hoy, 23 de abril (San Jorge), es un día importante para la palabra escrita. Y dado que una de las personas responsables de mi gusto por la lectura y escritura es mi madre, (que ya sabe lo que es llevarse premios en concursos de escribir) pues me apropio de este texto suyo, para hacer la entrada de hoy.
Sucedió en primavera
1- Esta frase tan cortita nos evoca de inmediato hermosos paisajes verdes, cubiertos de flores abriéndose bajo un cielo infinitamente azul, adornado por un sol radiante, árboles preñados de pimpollos de variados colores.
Y la gente por la calle, en los paseos sonriendo feliz, incluso en el trabajo, porque ya es primavera.
Y el amor, podemos imaginar a seres que se aman, bellas Venus que bendicen sus almas, traviesos Cupidos que hieren dulcemente los corazones y el amor brilla con todo su esplendor
Porque... ya es primavera.
2-Si, tú lector, o lectora has llegado hasta aquí. Si piensas que el capítulo anterior no es más que una cursilada de redacción, como las que nos mandaban en el colegio, quizá te hayas tragado el cebo del título... pero es que el título no decía nada de lo que podías haber imaginado.
3- Ese día me levanté de mal humor, era lunes y había que madrugar, a pesar de la resaca, abrí la ventana y vi que llovía, que el cielo estaba gris, la calefacción no funcionaba y hacía frío.
Ya en la calle me encontré con caras de sueño, paraguas que se daban la vuelta por el viento, los pocos árboles que habitaban en el asfalto puro y duro presentaban un aspecto desvalido, y juro que no vi ninguna flor.
No me esperaban Venus ni Cupido en ninguna esquina, con suerte subí al autobús y escuché las conversaciones, se hablaba de la crisis, del fútbol...en fin de las cosas normales, pero ni una, ni una sola palabra de amor.
Y eso que estábamos en primavera.
4- Cuando llegué a mi destino me sorprendió un cártel «23 de Abril, DIA DEL LIBRO»...entonces me percaté de que estábamos en primavera, porque siempre hemos sabido que está fecha cae dentro de una estación que se llama así, podía haberse llamado de otra forma...pero ese es su nombre.
5- Toda escritora que se precie sabe que palabras tiene que utilizar para despertar emociones, sentimientos, recuerdos...en quien lo lea. El título de un libro es el mejor reclamo, y eso no lo digo yo, lo dijo una renombrada escritora, y desde este humilde escrito quiero rendir un homenaje a los escritores y escritoras que saben transmitirnos tantas sensaciones a través del inmenso placer de la lectura.
6- Y además no he mentido. SUCEDIÓ EN PRIMAVERA
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