Pizzas, Mario Paper, Naranjas Mecánicas y otras cosas

 

Al agua patos. 

Por escribir algo, pondré aquí el fin de semana. Empiezo con el viernes, donde lo más destacable es una partida de rol en vivo que jugué de noche en la lonja, con claros homenajes a la película de Kubrick "La naranja mecánica", en la que solo soy una pobre víctima atormentada, y en la que el jugador que hace de malo, coincide que es pelirrojo. Mi personaje acaba peor que mal, pero yo me lo paso como un enano.

Tras la partida, nos vamos a tomar una al bar de enfrente, pero me retiro prontito, que el sábado tocaba madrugar. El motivo de levantarse pronto era que iba a Orduña, donde tenía una reserva para spa y menú, con uno de estos cupones de Grupón, o Groupalia, no me acuerdo. La mala suerte hace que por cuestión de segundos pierda el tren de las 10:05, y tenga que esperar una hora al siguiente, aunque por suerte llego a tiempo a Orduña, ya que el sitio estaba muy cerca de la estación.

Por la tarde, una visitilla a unos amiguetes (Giner, Gonzalo y resto de la banda), departiendo y arreglando el mundo, y luego a casa. Unas partidillas al divertido y simpático Mario Paper de la Wii, y unas pizzas para cenar (muy apropiado, teniendo en cuenta la nacionalidad de Mario) Unas pizzas de supermercado bastante malas, por cierto.

Y hoy domingo, por la mañana descansar, y tras un rico sushi para comer, por la tarde una de juegos en la lonja, donde estoy en estado de gracia y gano las dos partidas. Una al Ticket to Ride y otra a un juego sencillote, cuyo título no recuerdo, que consiste en colocar inventos cronológicamente.

Y para cenar, con el fin de quitarnos la espina de las mediocres pizzas de ayer, unas buenas y ricas pizzas turcas en un sitio que hay cerca de mi casa.