Despedida por jubilación, que rima con Eurovisión

Algunos de los txupitos del sábado.

Una cosa que ha habido mucho este fin de semana es lluvia, pero la entrada sería un poco sosa si queda ahí, de modo que voy con la rutina de los fines de semana. 

El viernes tocaba comida con los de mi viejo trabajo, pues se jubilaba la jefa de la otra sección, y se hacía un lunch para celebrarlo, de modo que aproveché para ir y saludar a la gente de por ahí. Tras la sobremesa, a La Peña, a casa del amigo Iván, donde pudimos probar el juego de tablero Heat, que simula carreras de F-1 clásicas. Gano en la carrera de Francia, pierdo en la de Inglaterra. Luego una vueltecilla con mi señora novia (cenar no, que entre los pintxos del mediodía y el picoteo de la tarde ya estaba lleno) y a casa.

El sábado pintxopote matutino, rol por la tarde (dirigía una partida protagonizada por los Guardianes de la Galaxia) y por la noche el evento musical etílico más esperado del año. Como de costumbre, de las canciones paso en moto, y en la parte importante, que es la de los chupitos, no tengo mucha suerte, ya que me toca la mediocre Eslovenia. Otro año más, vuelvo sobrio a casa.

Y hoy, paseo por la mañana tras ir a la lonja para adecentarla un poco y cartas por la tarde; segunda partida de la campaña de Thanos de Marvel Champions, donde damos buena cuenta de Corvus Glaive y Próxima Medianoche.

Ale, eso ha sido todo.