Una problemática que sigue muy vigente.
El año es 1943. El sitio un pequeño pueblo fronterizo en el Pirineo catalán y la situación que el encargado del puesto (un antigio miliciano republicano) ayuda, con la indirecta colaboración de un militar estraperlista a pasar judíos por la frontera, para que pasen a España y escapen al Reich.
Parte thriller, parte costumbrista, nos manda a esta Catalunya rural de la posguerra, con una historia interesante y el dilema moral de algunos personajes que tienen que decidir entre seguir las normas y hacer lo correcto, jugándose la vida, con unos nazis muy nazis por ahí incordiando y el inevitable personaje odioso de Jordi Sánchez.
Sin hacer un análisis particularmente profundo (hoy estoy vago) solo puedo decir que me ha gustado bastante y la recomiendo, pero especialmente en versión orginal, pues el tema de los idiomas tiene aquí bastante peso.
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