Que me pongan a Chuck Norris y a Jack Bauer, que me los meriendo
La película tiene, eso sí, algún que otro cliché bastante típico y predecible, pero se le perdona, ya que la película no necesita de grandes alardes de coherencia ni de un guión excelso. Probablemente si en vez de estar protagonizada por Patxi Mclane estuviera protagonizada por Fulanito Anónimo, sería una porquería, pero la Jungla es la Jungla. Vale, no tiene el elemento de "tío encerrado en un sitio y con los problemas revoloteando a su alrededor", pero la esencia de la jungla es Mclane y aquí Mclane está 100% en su salsa.
Vuelve la Jungla, vuelve McLane, o lo que es lo mismo, una película de acción incesante y chorros de adrenalina.
La Jungla 4.0 es una de esas películas de palomitas y saltos en la butaca en las que el argumento, una banda de hackers quieren colapsar el país para forrarse y se dedican a eliminar a todos los demás hackers, uno de los cuales es el que Patxi Mclane (porque visto lo visto Mclane es de Bilbao) tiene que proteger)
La película nos ofrece dos horas de pipadas y fantasmadas, y francamente me alegro de no tener más idea de tecnología y telecomunicaciones, porque hay cosas que aun en mi ignorancia me resultan un poco chocantes, pero dejemoslo en que más derecho tendría para quejarse un físico, ya que la película se mea en unas cuántas leyes físicas, y no importa, porque al igual que las tropas franquistas de la guerra civil, están al servicio del "Mola".
Patxi Mclane demuestra ser el tipo más duro a este lado del Ibaizabal, ya que es capaz de saltar de un caza en marcha, de enfrentarse a varias remesas de "Telemalo", de usar su propio hombro como silenciador o de lanzarle un coche patrulla a un helicóptero cuando se queda sin municiones (Nota mental: no jugar a airsoft contra John Mclane) y todo ello sin perder ni un ápice de su sorna. Impagable también la aparición del gran Kevin Smith, haciendo de megafriki, y alguna amenaza que le suelta Patxi Mclane.
La película tiene, eso sí, algún que otro cliché bastante típico y predecible, pero se le perdona, ya que la película no necesita de grandes alardes de coherencia ni de un guión excelso. Probablemente si en vez de estar protagonizada por Patxi Mclane estuviera protagonizada por Fulanito Anónimo, sería una porquería, pero la Jungla es la Jungla. Vale, no tiene el elemento de "tío encerrado en un sitio y con los problemas revoloteando a su alrededor", pero la esencia de la jungla es Mclane y aquí Mclane está 100% en su salsa.
De la película destaco también a las actrices Mary Elizabeth Winstead, en el papel de encantadora hijita de Mclane, y a la hawaiana Maggie Q, haciendo de sensual y peligrosa sicaria.
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