domingo, 30 de junio de 2024
Finde del ecuador del año
sábado, 29 de junio de 2024
Escapada friki vitoriana
jueves, 27 de junio de 2024
Preparando partidas para TdN
miércoles, 26 de junio de 2024
The Arctic Convoy
El año es 1941 y la historia la protagoniza un carguero mercante noruego, que forma parte de un convoy que lleva suministros desde Islandia hasta Murmansk, cosa que por lo que sea a la Alemania nazi no le termina de hacer gracia, de modo que bombardean el convoy y este barco se tiene que ir por su cuenta a territorio soviético, enfrentándose sin apoyo externo a las inclemencias del tiempo y los esporádicos ataques de la Luftwafe o la Kriegsmarine.
Básicamente cine de aventuras y supervivencia en un contexto bélico, que nos traslada a una parte del conflicto menos sobreexplotada que otras, y que nos da escenas maravillosas, como ese duelo contra el avión alemán, que nos tendrá bastante en tensión.
De buena factura y planteamiento interesante, no revoluciona el género, pero se puede ver.
martes, 25 de junio de 2024
Respira
Ni el poster ni la premisa me inspiraban mucha confianza, pero como tampoco tenía otro pito que tocar, me fui al cine a verla, para encontarme con lo esperado: una película de acción insulsa y sosa, que bien podría haber salido directaments a las plataformas de streaming.
En un futuro apocalíptico el oxígeno desaparece de la faz de la tierra, de modo que para respirar necesitan o bien estar en refugios con generadores o salir a la calle con toda la parafernalia mascaril ¿Alegoría del COVID? ¿Dónde?
Todo marcha relativamente bien para la familia protagonista, hasta que el padre se va a por tabaco y aparecen unos extraños con aviesas intenciones (o sea, sobrevivir) y se arma la marimorena, con gente disparándose entre sí y mucho agobio, porque el filtro amarillo quiere decir "calor sofocante".
Tampoco puedo ser mucho más profuso, pues la película es tan olvidable que la vi hace dos días y ya casi la he borrado de mi cabeza.
lunes, 24 de junio de 2024
Inside Out 2
En 2015 Pixar nos regalaba (es un decir que la entrada había que pagarlas) una de sus joyas más icónicas, con una película tan divertida como llena de significado. Nueve años más tarde, nos traen esta secuela en la que profundizan todavía más en la psique de su protagonista, el proceso de maduración en la pubertad y cómo emociones más complejas van surgiendo, para así ir creando la personalidad.
Obviamente no es tan buena como la original, pues el listón estaba extremadamente alto, pero es una secuela más que digna, con una historia que sigue resultando emotiva y entretenida, y con personajes nuevos repletos de encanto y carisma. Vale, Ansiedad puede ser cargante, pero está plenamente justificado que lo sea.
No sé si una tercera película tendría su cabida, o si sería ya estirar demasiado el chicle, pero si lo hacen, ahí me tendrán.
domingo, 23 de junio de 2024
El finde de la Sanjuanada
sábado, 22 de junio de 2024
Bad Boys: Ride or Die
viernes, 21 de junio de 2024
Dragoi Bola Z Kai (¡en el cine!)
jueves, 20 de junio de 2024
Cosecha literaria
miércoles, 19 de junio de 2024
Tarde de Scarface
martes, 18 de junio de 2024
Baneos y desbaneos (y en el fondo también devaneos) de Facebook
lunes, 17 de junio de 2024
Roleando en Joker
domingo, 16 de junio de 2024
Finde largo y de días largos
sábado, 15 de junio de 2024
La promesa de Irene
viernes, 14 de junio de 2024
Galletas de curry y queso
jueves, 13 de junio de 2024
Hit Man. Asesino por casualidad
miércoles, 12 de junio de 2024
Los vigilantes
martes, 11 de junio de 2024
Tarde de caza
lunes, 10 de junio de 2024
South Civilization
domingo, 9 de junio de 2024
Finde euroelectoral
viernes, 7 de junio de 2024
Tarde de victorias apretadas
jueves, 6 de junio de 2024
Paseación portugaluja
Tarde andarina la de hoy. Hoy había quedado con mi señora madre, con el ánimo de andar (y de que me invitase a un helado, claro), y a tal efecto he ido a buscarla a Portugalete, en un sitio tan icónico como el Puente Colgante.
De ahí, caminando hacia el sur, cruzando Portugalete, toda la antigua zona industrial de Sestao y apareciendo un poco en mitad de la nada, por Urbinaga, donde no había visos de camino peatonal y ha habido que hacer un poco que el cabra (lo que viene siendo cruzar una carretera por la que apenas pasaban coches, vaya) y aterrizar en Barakaldo, por la zona del Desierto (que de niño me hacía mucha gracia, porque me imaginaba el típico de arena, camellos y cactus), para ahí terminar cogiendo el tren, con destino a Bilbao.
Y como sé que me lee, un beso, amatxo :*