viernes, 29 de septiembre de 2017

Finde toledano y tenebroso

Refugio por dos noches.

Rumbo a Toledo, vía Vitoria, donde me recogen en el coche. ¿El motivo? el evento llamado "Cónclave de Tinieblas", un evento de fin de semana de rol, centrado en los juegos de la serie "Mundo de Tinieblas"; Vampiro, Hombre-Lobo, Mago... cuyo plato fuerte es una partida de rol en vivo el sábado por la noche.

Que nadie se eche las manos a la cabeza, que esto solo es juego, y todo lo que ocurra será en la ficción, sin que nos dediquemos a ir por ahí chupando sangre a nadie ni apuñalando gente con katanas en una marquesina. Esto es simplemente la excusa para juntarnos con gente que tiene aficiones comunes, y de ver a conocidos de otras ciudades que en otras circunstancias no solemos tener oportunidad de ver. Lo que vienen siendo unas jornadas, vaya, pero con ese componente temático. 

A ver qué tal. Reconozco que no es la temática que más me apasiones, pero conozco a la gente que lo lleva y sé que se lo currarán.

Y ahora, un poco sobre el sitio:

EL CASTILLO DE SAN SERVANDO 

El nombre del castillo tiene origen en el rey Alfonso VI, quien tras tomar la ciudad en 1085, convirtió la fortaleza árabe en un monasterio dedicado a San Servando y San Germano, en agradecimiento a su victoria en la Batalla de Sagrajas. Mas no era la primera vez que el edificio era dedicado a la vida monacal, pues ya en la época visigótica sirvió bajo esa función. 

Sin embargo, la paz en el castillo duró poco, pues si bien conoció la abundancia por mano de los reyes, en 1099 sufrió el ataque de los almorávides, al que siguieron otros durante el siguiente siglo. 

Ello fue provocando un lento declive y lo que antaño había sido una posición estratégica importante, perdió todo valor después de la batalla de Navas de Tolosa en 1212, por lo que fue abandonado. 

En el siglo XIV volvería a adquirir relevancia militar, con las luchas entre Pedro I y Enrique de Trastámara. En ese momento el Arzobispo Tenorio ordena que se reconstruya, finalizando las obras en 1386, manteniéndose así hasta la actualidad. La guerra siguió habitando en el Castillo, pues en 1857 se convertiría en un polvorín. 

En 1874 fue declarado Monumento Histórico Artístico Nacional, por temor a ser demolido por su venta en subasta, siendo el primer castillo en obtener dicha denominación. Fue reconstruido en 1959 y desde entonces ha tenido diferentes funciones, desde colegio mayor, pasando por residencia universitaria, con una fase de sede de las Cortes de Castilla la Mancha y finalmente lo que es ahora: un Albergue juvenil.

No hay comentarios: