lunes, 28 de febrero de 2022

Discusiones sobre reglas

Las he vivido todas.

No me gusta discutir sobre reglas. Si me gustara, habría seguido siendo abogado y así discutirlas de manera profesional y ganar algo de dinero en el proceso. Pero no es el caso. Lo odio, aunque como soy tonto muchas veces me dejo llevar y entro al trapo, de modo que esta genial tira cómica me resulta muy familiar, como se lo resultará a cualquiera que sea más o menos aficionado a los juegos de mesa.

Las he sufrido todas, pero he de decir que las que más detesto son la cuarta y la octava, sobre todo cuando la discusión versa sobre cosas que no son ya tanto sobre reglas, sino sobre saber leer y tener nociones básicas del idioma, pese a lo cual siempre hay alguien que trata de encontrar justificación para las interpretaciones más rocambolescas y contrarias al sentido y al texto de la norma. Pero si pasa en el mundo de las leyes, raro sería que no pasara en el de los juegos.

En cualquier caso, sirva esto para echar unas risas y ver reflejadas muchas situaciones en las que nos habremos visto envueltos.

domingo, 27 de febrero de 2022

Finde carnavalesco

Gastronomía propia de estas fechas. 

El título es un poco falaz, dado que no me he disfrazado (por la tontería llevo bastantes años sin hacerlo), pero como es lo más significativo y de alguna manera tenía que llamar la entrada, ahí que va.

El viernes tras la típica visita al gimnasio, un poteo y cena de celebración de temas laborales de mi señora novia y sus compañeros, con posterior tertulia y buenas risas.

El sábado me doy un largo paseo, yendo hasta San Ignacio y volviendo por toda la ría hasta el Casco Viejo, con unos cuántos pasos para la pulsera, con parada en Joker para coger el Clank Legacy. La tarde me la paso en casa, jugando a Farcry 5 y Marvel Champions (Starlord Liderazgo) y capítulos de Cómo conocí a vuestra madre. Por la noche a la lonja, donde jugamos a Traicion (uno de roles ocultos basado en Dune), 2491 Planetship y Factory Funer. Pierdo en todos los juegos, está claro que no era mi día.

Hoy domingo, por la mañana quería ir al gimnasio pero me lío a hacer unas torrijas y cambio el cardio por un paseo. Por la tarde una nueva sesión de Pendragon y, si no me dejo nada, eso ha sido todo. 

sábado, 26 de febrero de 2022

Nueba adquisición legaciesca: Clank!

Me ha venido siguiendo hasta casa.

Llevaba tiempo con la idea de querer comprar este juego, y aunque todavía no sé cuándo lo podré jugar, hoy me he calentado y lo he terminado comprando. Es la versión Legacy, con modo campaña del Clank!, un juego del que aún no he hablado por aquí, que básicamente mezcla las mecánicas de construcción de mazos del Dominion con una exploración contrarreloj, en la que los jugadores tienen que saquear una cueva, antes de que la dragona que lo habita despierte y los mate.

Esta versión Legacy no sé cómo estará, y la verdad es que he podido ver opiniones tanto positivas como negativas, pero como la gracia de estos juegos está en dejarse sorprender, no he querido mirar más, de manera que cuando nos pongamos a ello podré opinar mejor. Pero hasta que eso suceda, aún pasará algo de tiempo. 

jueves, 24 de febrero de 2022

Superstreameando

Opinando sobre Nova.

No soy yo alguien muy dado a los eventos telemáticos, y de hecho el portátil que suelo usar para las videoconferencias llevaba desde mayo metido en la funda, pero hoy tenía a las 22:00 una charla en directo sobre el juego Marvel Champions, en el canal del podcast La mano de Thanos donde hemos estado algo más de hora y media comentando las futuras novedades del juego, y en especial las filtraciones de Ironheart y Nova.

La charla se ha emitido en directo en Twitch, así que supongo que ahora tendré que mudarme a Andorra, o algo.

miércoles, 23 de febrero de 2022

Aplicaciones que se caen

El soporte informático de la Diputación.

"Lo siento, pero te tengo que coger esto en papel y quedármelo. Normalmente lo escaneamos y os lo devolvemos al momento, pero se nos ha caído el sistema normal y tenemos que usar el antiguo", cuando no directamente "Lo siento, pero se nos ha caído todo el sistema y no podemos hacer nada" son frases que por desgracia estoy teniendo que repetir muy a menudo estos días, a causa de las constantes y frustrantes caídas que sufre la aplciación que usamos para trabajar. Concretamente, en esta semana y la anterior ha habido un día en el que no se haya caído, y en varios días ha habido más de una y más de dos ocasiones en las que todo dejaba de funcionar. Y esto no es nuevo, sino que es algo que sucede con demasiada frecuencia. 

Y si ya para nosotros es molesto, pues no me quiero ni imaginar para los usuarios, que gastan su tiempo en pedir una cita, ir hasta ahí con los papeles y que no se les pueda hacer bien el trámite. No sé de quién será la responsabilidad, pero está claro que alguien no está haciendo su trabajo.

martes, 22 de febrero de 2022

El callejón de las almas perdidas

La estética, su punto más fuerte.

Stan Carlisle (Bradley Cooper) es un hombre que, huyendo de su pasado, termina fichando por un circo de variedades en la época de la Gran Depresión, y allí se convierte en un mentalista de éxito, que vive de estafar a incautos, hasta que encontrará lo que parece la horma de su zapato.  

Le tenía muchísimas ganas, pero no puedo negar una cierta decepción con esta película, aunque esto se debe sobre todo a las expectativas que yo me había formado por el trailer, y por ser de Guillermo del Toro. No puedo decir que sea una película horrible, pero queda muy lejos de lo que yo esperaba de ella.

Visualmente, lo que sorprende poco cuando hablamos de Guillermo del Toro, es impecable, y la historia no está del todo mal, pero me da la sensación de que es una película a la que le traiciona un mal montaje, pues tiene algunos momentos de tedio, otros en los que la trama parece precipitarse y tiene hilos colganderos (lo concerniente al padre del protagonista, que entre contart eso y nada...) o escenas que si bien visualmente impactan (la del juez y su mujer) no le suman nada a la trama.

La película tiene tres partes bien diferenciadas, con un primer acto, que es el de la vida del protagonista en el circo y su "nacimiento" como mentalista-estafador, que me pareció de largo la parte más interesante. Le sigue un nudo que se se me hizo un tanto plomizo y termina con un final que coge el estofado que ha tenido tres horas a fuego lento y lo mete de repente en el microondas. Lo que quiere contar es interesante, pero la forma de contarlo se me hacía atropellada (no pretendía hacer el chiste con cierta escena, lo prometo) y un epílogo que conduce a un final con un giro de guion que justifica el título de la película , y que aunque parece querer sorprender al espectador, en realidad no sorprende ni a Pikachu. Y ojo, que no tengo ningún problema con los finales previsibles, pero aquí quedaba un poco ridículo que fingiera querer ser una revelación sorpresiva.

lunes, 21 de febrero de 2022

Interocio 2022

¿Podré llegar esta vez a Ciudad Esmeralda?

Este evento, en su malograda edición de 2020, cuenta con el dudoso honor de ser el primer evento que se me cayó por culpa de la pandemia, y al que por desgracia luego siguieron unos cuántos (todos, para ser exactos). En 2021 tampoco se hizo, y parece que, si la cosa no se tuerce, por fin se va a poder hacer este año. Concretamente del 11 al 13 de marzo en el IFEMA de Madrid.

Y ahí estaré yo, pero no en calidad de asistente, sino como colaborador, ya que detrás de esto está la misma gente que organiza las TdN, y eso es suficiente como para que yo quiera estar ahí echando una mano. Además, poder hacer el primer evento que se cayó es también un poco volver a cierta sensación de normalidad. 

Veremos qué tal la experiencia. Más información sobre el evento aquí.

domingo, 20 de febrero de 2022

Por llamarlo de alguna manera... finde con galletas

Así posaban, recién horneadas.


Las galletas que dan nombre a la entrada no son lo único que he hecho este fin de semana, pero de alguna manera tenía que titularla.

El viernes fue día audiovisual, con una de cine (Uncharted) y una de teatro (Espíritu), ambas cosas ya comentadas aquí. El sábado por la mañana me di un paseo hasta una tienda de juegos a la que voy de cuándo en cuándo y me encontré con unos conocidos, que iban a echar una partida al Tiranos del Underdark y me invitaron, de modo que me uní, y aunque no estuve ni cerca de ganar, me lo pasé bastante bien. 

Luego un pintxopote con mi señora, como y me da por hacer galletas porque sí. Por la tarde a la lonja, donde tenemos el campeonato de Fórmula Dé (los dados en la curva final me traicionan y me relegan a la 4ª posición) y luego por la noche tertulia y partida al chorrijuego Taco Gato Cabra Queso Pizza (se llama así).

Domingo por la mañana gimnasio, que lo tenía un poco abandonado, pintxopote y rol por la tarde, en la partida Calles de Fuego, del juego X-Corp, de obvia inspiración en el juego X-Com.

Y eso ha sido más o menos todo. 

sábado, 19 de febrero de 2022

Espíritu

En ocasiones veo muertos.


Igual que el año pasado, mi señora novia tuvo a bien regalarme entradas para el monólogo de Santi Rodríguez, y ayer fuimos a verle actuando en el teatro Campos de Bilbao, donde nos deleitó con "ESpíritu", un monólogo en el que se pone en la piel de un fantasma recién fallecido y nos lanza divertidas reflexiones sobre la vida, la muerte y la vida en el más allá, haciendo un espectáculo que aunque algo más corto de lo que suele ser habitual (80 minutos), fue todo lo divertido que esperábamos, y el año pasado dejó el listón alto. 

Y no cabe duda de que si el año que viene repite, ahí estaremos para verle. 

viernes, 18 de febrero de 2022

Uncharted

Tom Holland, abonado al cine de acción y los saltos imposibles.

Como en toda película que se basa en un videojuego que no he probado, me tengo que limitar a hacer la valoración como película suelta, ya que no tengo manera de saber cómo de respetuosa que es con esta saga de la que solo sé que Nathan Drake es una especie de versión masculina de Lara Croft.

Atrás quedaron los tiempos en los que no se salvaba ni una sola adaptación de videojuego a película, ya que esta consigue su propósito de ser, cuando menos, divertida. No es una gran película, que nadie se lleve a engaño. Es una sucesión constante de fantasmadas y sinsentidos ante la que hay que tener el cerebro completamente apagado, pero quien vaya esperando otra cosa, se ha equivocado de sala.

Aquí ha venido uno a ver búsquedas del tesoro con enigmas de ridícula resolución, trampas sin venir a cuento, malos muy malos y escenas en las que las leyes de la física son sistemáticamente maltratadas.  Yo salgo contento, ya que es lo que quería ver hoy.

Se nota, por cierto, que la idea es hacer de esto una saga, y así lo demuestra ese epílogo con cliffhanger que hace de escena postcréditos, abriendo la puerta a una secuela que puede que llegue, puede que no. La recaudación lo dirá.

jueves, 17 de febrero de 2022

Artbreeder

El linaje de Lake.

El árbol genealógico que se ve en la foto pertenece a la ficticia familia de mi personaje, Cuanacht de Lake, de la Gran Campaña del juego de rol Pendragon. Pero hoy no voy a hablar de eso, sino de la aplicación online que utilicé para generar las fotos, pues creo que es bastante chula.

Se llama Artbreeder, y se puede encontrar en esta página. Nos permite jugar con los retratos, dejándonos cambiarle la edad, la raza, el género, el color de pelo, el estado de ánimo... y no es perfecto, pero con un poco de maña se pueden hacer cosas. También nos permite coger dos retratos y crearles "descendencia", tomando rasgos de una u otra foto, con el resultado que se ve ahí. Ya, lo que es el árbol fue tirando de recorte de imágenes y Word, pero con muy poquito esfuerzo se pueden hacer cosas chulas. 

La única pega que le veo es que está muy orientado a usar las imágenes que vienen en su librería (y las que vamos creando a partir de estas), pues aunque da la opción de subir alguna foto, está muy limitada (para la versión de pago, básicamente). Aún así, merece la pena echarle un ojo, que como herramienta rolera es toda una oportunidad. 

miércoles, 16 de febrero de 2022

La prueba del Lost Ark

Creo que ahí se va a quedar.

Los videojuegos, sin ser mi pasión, son uno de mis hobbies, pero una de mis manías es que nunca juego online, lo odio. Pero a veces hay que quitarse prejuicios y probar cosas nuevas, de modo que, viendo que estaba gratis en Steam, decidí descargar el juego de moda, a ver qué tal.

Pero contaré el resultado en esta breve historia de cinco actos:

Descarga e instala el Lost Ark por curiosidad. 

Abre Lost Ark. 

Da a iniciar partida nueva. 

Ve que no hay forma de jugar, que todos los servidores están llenos y hay que esperar un número de unidades de tiempo superior a 0. 

Desinstala Lost Ark.

Tal cual. Para jugar, como suele ser lógico, hay que conectarse a alguno de sus servidores, y en todos ellos había unas colas larguísimas para entrar (hablaban incluso de horas). Y lo siento, pero eso es algo por lo que no estoy dispuesto a pasar, de modo que salir del juego y a paseo. Ya veremos si en un futuro, cuando se pase el bombazo, me decido a acercarme. 

martes, 15 de febrero de 2022

Drive my car

Es ver la foto y ya me entran ganas de bostezar. 

A pesar de las grandes críticas que está recibiendo, mi instinto me previno contra esta película, pero me la recomendó muy fuerte alguien de cuyo criterio me fío y decidí darle una oportunidad. 

Esta vez no acertó, y es que no solo he sido incapaz de ver a esta película las virtudes que se le suponen, sino que me supuso un suplicio que me hizo llegar a plantearme varias veces la posibilidad de irme del cine antes de que terminara, ya que dura tres horas, de las que dos me las pasé mirando el reloj.

Tras un prólogo de literalmente 45 minutos (lo que ya puede dar una idea del ritmo de la película), nos cuenta la historia de Kakufu, un director de teatro que tras sufrir un trauma en su vida se muda a Yokoshima, para trabajar con una productora de teatro que va a representar Tío Vania, de Chejov, y allí conoce a gente que para él será importante, destacando  Watari, la chófer que, por obligación contractual tiene que conducir el coche de Kakufu, a pesar de la reticencia inicial de este. Ese detalle, que da título a la película, no es baladí, ya que para él su coche es su templo, el sitio donde encuentra tiempo para sí mismo y se refugia de sus problemas. Y verse obligado a compartirlo le obligará a compartir otras cosas de su vida.

Extremadamente lenta, no solo se me hizo pesada, sino que además me dejaba con una constante sensación de no saber lo que me quería contar, como si fuera un mar de metáforas que no terminaba de entender, entre sus laaaaaaaargos planos, sus soporíferos silencios o las largas y repetitivas escenas de los ensayos que no me aportaban nada más allá la sensación de que esta película dedicaba 180 minutos a lo que podía haber hecho en la mitad. Y, para rematarlo, un final que hace la película agonice y no se quiera terminar de ir, teniendo como momento más disfrutable ese en el que por fin salen los títulos de crédito y se encienden las salvadoras luces de la sala, permitiendo al espectador salir de ahí.

Habrá a quien le haya gustado, pero sin duda no ha sido mi caso. Hacía tiempo que no me aburría tanto viendo una película. 

lunes, 14 de febrero de 2022

Farcry Primal

¡Hoy cenamos mamut!

Si no me equivoco, Farcry Primal es un DLC de Farcry 4 que nos presenta una historia completamente nueva y sin relación con el juego principal (como pasaba con el Farcry 3 y el Blood Dragon), para transportarnos al paleolítico, donde tendremos una historia principal y, como es marca de la casa, mil mierdas para desbloquear, muchas bases que tomar y unbuen puñado de misiones secundarias. 

El juego que nos enseña valores tan importantes como la tolerancia, el respeto a la diversidad y matar a porrazos a cualquiera que no sea de tu tribu en cuanto ves que asoma la cabeza, es bastante fácil y la historia principal no es demasiado larga (y tampoco demasiado compleja, siendo básicamente los conflictos tribales entre nuestra tribu, los wWenja, con las tribus rivales, los Wdam y los Izila), por lo que yendo a piñón se lo puede uno terminar fácilmente en un par de tardes. Pero si nos liamos a tomar todas las bases, cazar todos los bichos, mejorar todas las casas y ganar todas las habilidades, la cosa cambia. Y ya si nos ponemos a descubrir cada localización y cada tesoro oculto del mapa, nos podemos ir perfectamente a las 60-70 horas de juego.

Una buena adquisición, cuya genialidad reside en su simpleza y que traslada bastante bien el espíritu de la saga Farcry a la era de las cavernas, con acción, toques de humor, personajes pintorescos y malos muy maos, supliendo la variedad de armas de fuego de otras entregas con la posibilidad de cazar y domar animales a los que mandar a matar enemigos.

domingo, 13 de febrero de 2022

Fin de semana atípico

Apasionante plan de sábado.

Aunque sea domingo, en realidad estoy un poco a mitad de fin de semana, ya que ayer me tocó trabajar y mañana solo trabajaré por la tarde. Sin embargo, y siguiendo la tradición, iré a contar el viernes-domingo.

El viernes después de echar una siesta y visitar a una amiga, fui a la lonja, donde jugué (y gané holgadamente, de vez en cuándo hay que presumir) una partida al juego Beyond the Sun. Luego me retiré a casa pronto y aproveché para terminad de ver la tercera temporada de Daredevil, antes de que la quiten de Netflix.

El sábado tuve que madrugar más de lo habitual, ya que tenía que estar a las intempestivas 7:45 en el BEC, para vigilar dos exámenes (liquidadores por la mañana y trabajadores sociales por la tarde). Una tarea muy aburrida y cansada, pero que como a cambio nos dan 12 horas libres, pues compensa.

Al acabar, a casa a ducharme, cena con los de la partida y partida, de Avengers: Aftersnap. Aunque ayer era más bien Defenders: Aftersnap, pues solo juego, no dirijo mi parte.

Domingo por la mañana una de vagueo absoluto, jugando al Farcry Primal hasta la hora de comer. Y por la tarde más rol, con otro episodio de la Gran Campaña de Pendragon. ¡A ver si Arturo saca de una vez la espada de la piedra y pone un poco de orden, hombreya!

Luego un paseo para bajar la merienda y retirada a casa, sabiendo que mañana no tocará madrugar. 

viernes, 11 de febrero de 2022

Vigilancia líquida

¿Pero quién vigila a los vigilantes?

Mañana es el día. A las 7:45 de la mañana tengo que estar en el BEC, donde se celebrará, entre otros, el primer examen de las oposiciones de liquidador para la Diputación de Bizkaia. 

A ese examen estaba apuntado yo, pero ya comenté por aquí que mi motivación era literalmente cero, y que no había estudiado absolutamente nada (ni tenía intención de hacerlo), y que por eso, cuando surgió la opción de renunciar a hacer el examen para ir a cuidarlo, me lo pensé seriamente. Tan seriamente que acepté, de modo que estaré mañana en ese examen, pero de cuidador.

En ese y en otro que es a la tarde, así que me va a tocar pasar bastantes horas en el BEC. Pero teniendo en cuenta que me las pagan, merece la pena. 

jueves, 10 de febrero de 2022

Toma de posesión

De esta no, de la otra.

Ya es oficial. A partir del lunes dejaré de estar adscrito al departamento de Acción Social, para tener plaza en el Parque Móvil de la Diputación, por lo que habré conseguido mi objetivo de no pisar ni un solo día las oficinas a las que trataron de enviarme contra mi voluntad. Esto es algo que, al margen de otras consideraciones, no puedo sino considerar una pequeña victoria moral.

Sin embargo, y en un corto/medio plazo, esto no va a afectar en nada a mi día a día, pues voy a seguir en la misma comisión de servicios en el registro, donde la semana que viene haré tres años ya. Y al haberse quedado la plaza que ocupo sin titular, todo indica a que estaré ahí hasta el siguiente concurso, que fácilmente pueden ser 2-3 años más. 

Pero el día que me tenga que ir a mi plaza, será a una que sí quiero ir.

miércoles, 9 de febrero de 2022

Belfast

Buddy y su familia.

Kenneth Branagh se lanza a la carrera de los Oscars con una película más o menos autobiográfica, en la que nos habla de sus recuerdos en el convulso Belfast de finales de los 60. 

Es una película sobre todo costumbrista, que recrea muy bien esa época (visualmente nos traslada muy bien), pero que no deja de ser una sucesión de cosas que pasan, sin llegar a contar realmente nada. Tiene algunas escenas muy dignas, y algunos recursos narrativos muy interesantes, pero realmente carece de un hilo conductor que terminara de captar mi interés, y habla de muchas cosas (la tolerancia, la amistad, la familia, el arraigo, su pasión por el cine y el teatro...) pero no se enfoca en ninguna, con lo que se queda en una sucesión de pinceladas sobre lo que fue la infancia del director.

Entiendo que era esto lo que buscaba Branagh, pero es una propuesta que no me ha terinado de cautivar, y que incluso a ratos me llegó a aburrir. 

martes, 8 de febrero de 2022

Indemnizanding

Vuelos por -80€.

En septiembre, volviendo de Alicante, tuve un desagradable incidente que hizo que un vuelo previsto para las 20:05 terminara saliendo a las 7 de la mañana del día siguiente, obligándome a hacer noche en hotel, pegarme el madrugón y cuando llegué a Bilbao ir a casa a ducharme y de ahí al trabajo, donde estuve completamente zombi.

Puse mi queja en la web de Vueling, donde un mensaje con pinta de respuesta automatizada poco más o menos me mandaba a paseo. Entonces un conocido me habló de la empresa Erreklamatu, dedicada a gestionar este tipo de cosas, y me puse en contacto con ellos. Me pidieron los datos del vuelo, me explicaron las condiciones (solo se paga si se gana, un 20% de lo conseguido más IVA), así que acepté y les mandé la documentación.

Ahí se quedó la cosa, y yo ya me había olvidado del tema, pero ayer a mediodía me llamaron de Erreklamatu para decirme que habían conseguido resultados. Concretamente una indemnización de 250€, de la que descontados sus honorarios me quedarán casi 190. Lo que, teniendo en cuenta que el vuelo me salió por unos 120 quiere decir que no es que volara gratis, es que gané dinero por volar. 

En el momento fue una putada, pero oye. A nadie le amarga un dulce.

lunes, 7 de febrero de 2022

Moonfall

¡Es la luna, y va a atacarnos!

Lo bueno de Roland Emmerich es que uno sabe qué se va a encontrar cuando va al cine a ver una película suya, y con Moonfall no decepciona. Es una patochada completamente insustancial de catástrofes y aventuras en las que cuesta hacer que las cosas tengan sentido y que cuando intenta ser seria se vuelve todavía más ridícula y divertida. De las que hay que ver con el cerebro apagado, extraído y cuidadosamente guardado en su ambalaje original, pero que si conseguimos entrar a su juego es plenamente disfrutable. 

Emmerich, que nos ha lanzado lagartos gigantes, invasiones alienígenas, maldiciones mayas, glaciaciones o un John McLane de baratillo, nos plantea como nuevo escenario catastrófico en el que la Luna se sale de su órbita y se abalanza sobre la tierra los Estados Unidos de América, poniendo en grave peligro a la Humanidad y a las leyes de la física.

La película empieza con tres astronautas (Brian Harper, Halle Berry y astronauta prescindible) haciendo sus cosas de astronautas en la órbia de la luna, cuando algo emerge del satélite y ataca a la nave, de forma que astronauta prescindible muere. Vuelven a la tierra de mala manera, y como la NASA necesita una cabeza de turco, Harper es degradado de astronauta a borracho divorciado que vive en autocaravana, no llega a fin de mes y tiene un hijo adolescente que siempre la está liando, lo que en la vida real sería una putada, pero que en una película de catástrofes es un seguro de vida. Además, su ex-mujer está casada con un millonario (Michael Peña) que parece gilipollas pero en el fondo es majo, y que se lleva fatal con el hijo adolescente. Ni cotiza que todos se acabarán llevando bien, y las casas de apuestas pagan poco por muerte triste con sacrificio heróico de Michael Peña.

A todo esto, ya es 2022, y todo comienza cuando un friki arquetípico y teórico de la conspiración, de los que duermen con su almohada hentai y escriben en Forocoches, trabaja de conserje en el observatorio de Los Angeles y como hobby hackea el ordenador de un jefazo, descubriendo así datos que confirman su loca teoría: la Luna es una superestructura alienígena, y se está saliendo de su órbita.

El friki contacta con el astronauta Harper, se juntan con Halle Berry y tras una serie de peripecias e investigaciones, donde descubren que la NASA lo sabía todo, terminan yéndose de excursión a la luna, tras una epectacular secuencia de despegue que seguramente vulnere todas y cada una de las leyes de la física, pero como la tierra ya ha empezado a irse al carajo, pues adelante con todo. 

Pero antes de eso, la NASA ha enviado otro cohete a la luna, pero como eran astronautas sin nombre ni peso en la trama, mueren de forma ridícula, de forma que el ejército de los EEUU ya está acariciando nervioso el botón de las nucleares para volar la luna, y Halle Berry tiene que lidiar con que ex-marido, un militar de alto standing con el que tiene un hijo en común y una relación cordial (consejo básico de supervivencia en películas de catástrofes: llévate bien con tu ex), para que no la líen petarda.

En ese momento, la historia se desarrolla en dos frentes. Por una parte Halle Berry, Harper y el friki están camino de la luna, mientras que los hijos de los protagonistas(de los guapos, claro, el friki solo tiene gato) están correteando de un lado a otro y viviendo apasionantes peripecias en busca del bunker salvador. Ahí van viendo cómo afecta a la tierra la inminente llegada de la luna, y pasan cosas como que la gravedad empieza a fallar, o se va el oxígeno se va y viene, como cuando se va la señal wifi, haciendo que los pájaros se caigan del cielo, como piedras, y que mi cerebro arañe con desesperación las paredes del cráneo, queriendo huir.

Pero vamos otra vez a la luna, donde nos cuentan el giro gordo de guión, con la sorpresa que ya se encargaban de reventarnos en el trailer (menos mal que no lo vi), y es que la luna es una superestructura, creada por una raza alienígena hace millones de años, y que el bicho mortal que hay en la luna es una criatura cthulhuioidea, hecha de nanobots y entrenada para cazar vida orgánica, y es que nos cuentan que hace muchísimos años la humanidad vivía feliz y en armonía, hasta que las máquinas se rebelaron, les aniquilaron (les faltó añadir "y ahora tienen un plan" para terminar de fusilar Battlestar Galactica). Y como hicieron en Krypton, los antiguos humanos crearon lunas, que eran arcas para llevar su ADN a otros planetas (no lo explica expresamente, pero se sobreentiende que un dinosaurio millonario crea un parque temático con humanos clonados, provocando así su extinción). Todo esto en una escena en la que intenta, supongo, homenajear a 2001. 

Pero una película de catástrofes no es tal sin su sacrificio heróico, y para salir de ahí y matar al bicho alguien tiene que quedarse para hace explotar una bomba. De los tres, Halle Berry es guapa y Harper es guapo, así que solo queda una opción. Harper se intenta sacrificar, pero en el último momento, el friki se cuela y decide ser él el héroe. Se mete en la boca del bicho cthulhuioideo de nanobots, presiona el detonador y, ¡Chocapic!

No hay bicho y todo resuelto. Los héroes vuelven a la Tierra, donde pese a estar todo arrasado y las imprevisibles consecuencias a largo plazo de que la luna esté a cinco minutos en autobús de cualquier punto de los EEUU, un sol radiante nos indica que todo se ha solucionado mágicamente.

Conste que la película tiene bastante menos sentido que como la he contado aquí, pero un despropósito es lo que quería ver y un despropósito me encontré, de modo que no le puedo poner ni un solo pero. Gracias Roland Emmerich, por darme exactamente lo que te pedí.

domingo, 6 de febrero de 2022

Lúdico fin de semana

Ya vendrán las vacas flacas, pero de momento a disfrutar.

Otro domingo que se va, otra entrada en esto que hace tiempo se convirtió en una sección fija del blog (que, a fin de cuentas, empezó siendo eso, mi diario). El viernes fui al trabajo un poco zombi, pues no había dormido muy bien, de modo que cuando llegué a casa después de comer cayó una buena siesta. Luego a casa de unos amigos, plan de juegos de mesa y merienda (aunque una de sus huronas insistía en que la merienda fuera yo). Le dimos al U.S. Telegraph, al Azul y al arroz frito con pollo, que no es un juego de mesa, pero apetecía.

U.S. Telegraph

El sábado por la mañana voy a jugar a Marvel Champions y probamos algunas cartas de DC en un curioso crossover: Capitán América, Bruja Escarlata, Nightwing y Supergirl contra Gorila Grodd. Ganamos.

Luego un pintxopote y por la tarde a la lonja, donde jugamos una larga partida de Die Macher, juego que simula la política alemana y tras varias horas de partida, la cosa termina en empate (y mira que es difícil, porque empatamos a 402 puntos). Y como nos dieron las tantas jugando, de ahí a casa.

Una jugada magistral en Baja Sajonia me dio un montón de puntos. 

El domingo por la maána lo dedico a descansar y jugar a Farcry Primal, y por la tarde, como tenía baloncesto a las 20:00, aprovecho para ir al cine a ver la deliciosamente infame Moonfall (mañana me explayo más) y al salir me doy un paseo hasta Miribilla, donde asisto al mejor partido hasta el momento de la temporada, entre dos de los equipos más en forma ahora mismo de la ACB (Bilbao y Manresa). El equipo visitante, que jugaba de maravilla, fue por delante durante 34 minutos en el marcador, llegando a alcanzar distancias de diez puntos, pero echando huevos y con el apoyo del público, Bilbao Basket supo dar la vuelta al partido y terminar ganando 89-82. No parece que este año el descenso vaya a ser una de nuestras preocupaciones. 

Y eso ha sido todo, ahora 6 días laborales por delante (el sábado que viene toca trabajar). 

jueves, 3 de febrero de 2022

DC Champions

Procediendo a enfundar.

Hace unos meses, unos aficionados al juego Marvel Champions editaron unas cartas caseras que adaptaban los héroes y villanos del unoverso DC, con un resultado increible, tal como se puede ver en las fotos. Y salió la iniciativa de hacer una impresión conjunta de las cartas, que así salía más barato. Importante aclarar que ellos no han visto un duro con esto, que lo hacen por amor al arte. 

Hoy por fin me han llegado. Más de 700 cartas con un diseño perfecto y un acabado muy bueno. La cartulina es algo más fina que la de las cartas oficiales, pero parece de calidad decente, y con fundas eso no se nota mucho. 

Cambian alguna cosita con respecto al juego, como los nombres y colores de los aspectos, pero por lo demás es totlmente compatible, aunque al ser el reverso distinto, toca usar fundas opacas o asumir que al jugar vamos a saber si la carta que robamos es de DC o Marvel, que tampoco es ningún drama. 

Ahora lo que toca es probarlos, para ver qué tal funcionan en la mesa de juego. Pero con 9 héroes, 5 villanos y unos cuántos conjuntos modulares de encuentro, variedad hay para un buen rato. 

Nota: no acredito a los autores, por si acaso prefieren permanecer en perfil bajo, pero aunque ya lo he hecho por otros canales, aprovecho nuevamente por aquí para felicitarles y agradecerles su fabuloso trabajo. 

miércoles, 2 de febrero de 2022

Reinos Rodados

El reino de Dadonia.

Este es un juego roll&write (tira los dados y escribe) o, mejor dicho, un juego de minijuegos, en el que a lo largo de las tres rondas que tiene, dividida cada una en 9 turnos, los jugadores intentarán conseguir el máximo número de estrellas, que son los puntos de victoria. Para ello, como se puede intuir, deberán utilizar los resultados de los dados, que son los mismos para todos, y colocarlos donde más les ayude a puntuar.

Preparación

Lo primero que hay que hacer es dotar a cada jugador de un rotulador (es de los que se borran fácil), una tarjeta de puntuación y una de recursos, que es donde irán apuntando... los puntos y los recursos. También hay que dar a cada jugador sus 11 cartas, con cada uno de los 11 reinos, que son los minijuegos. Para la primera ronda se roban 3 al azar (cualquier jugador puede hacerlo) y cada uno buscará su copia de cada uno de esos tres reinos, para que todos tengan los mismos.

Cada jugador tendrá así, tres cartas, "reinos" en juego.
 
Cartas de recursos y puntuación.

Mecánica básica

Cada ronda se tirarán los dados 9 veces. En realidad da un poco igual quién lo haga, pues los resultados son iguales para todos, pero se irán turnando los dados. En la hoja de puntuación se apuntará lo que ha salido (sirve, sobre todo, para no perder la cuenta de cuántos turnos se llevan jugados) y en la de recursos los que se vayan ganando y gastando a lo largo de la partida.

Cada turno se tiran dos dados y cada uno de esos dados puede asignarse a uno de los reinos. Esto se llama "activar el reino", y salvo excepciones que luego se explicarán, cada reino solo se puede activar una vez por tirada. Dicho de otra manera: puedes mandar los dados al reino que quieras, pero no al mismo sitio.

Eso hará que ganemos recursos y, en su caso, estrellas, que son los puntos de victoria. Si se da la circunstancia (a veces ocurre) de que un dado no podemos asignarlo a ningún reino, ganamos un recurso a nuestra elección.

Los recursos 

Los hay de tres tipos; calabazas, corazones y monedas, y cuando se ganan no se borran, sino que se tachan, ya que en algunos reinos es relevante cuántos hemos ganado, con independencia de si los hemos gastado o no. Sirven para lo siguiente:

Calabazas: Con dos calabazas podemos dar un +/- 1 a un dado, pero con 3 podemos darle un +1/-1/0 y mandarlo a un reino que ya hayamos activado. 

Corazones: Con dos podremos "crear" un dado virtual si en la tirada han salido dos resultados iguales y con tres podremos copiar el resultado de cualquiera de los dos dados si estos son distintos.

Monedas: Si la suma de ambos dados es 7, con dos monedas podemos copiar el resultado de uno de ellos. Si no, podemos pagar X monedas para ganar un dado virtual de valor X. 

Los recursos, y aquí está la gracia, se pueden combinar y usar en cuanto se usan, y es lo que le da la estrategia al juego.

Al final de la ronda, los recursos no gastados se convierten en 0,1 puntos de victoria. 

Los reinos

Como dijimos antes, cada reino es un minijuego, con sus propias reglas de puntuación, aunque tienen una cosa en común, y es que en cada uno de ellos se pueden conseguir hasta 6 estrellas (puntos).

Estos son:












Las cartas son autoexplicativas, de modo que me ahorro lo de copiar el texto, que para eso está la foto. La coña es que cada tarjeta hace referencia a un juego de la editorial que publica Reinos Rodados, y las mecánicas tienen ligeras resemblanzas al juego que les da nombre, al menos en los que he probado.

Recordemos, cada ronda se sacan tres reinos, se juegan 9 turnos y al acabar cada jugador gana un punto por estrella y un decimal por recurso sobrante. Se apuntan los puntos en la tarjeta de puntuación, se borra todo (los recursos no se trasladan de ronda a ronda) y se roban tres nuevos reinos para la siguiente.

Estes es un juego bastante ligerito y fácil de aprender, en el que el número de jugadores (la caja trae material para hasta seis, pero con más copias del juego, o fotocopias, se puede ampliar mucho este número) y en realidad es un multisolitario, ya que la interacción entre jugadores es nula y se trata simplemente de ver quién ha conseguido optimizar mejor los resultados al cabo de las 27 tiradas.

Trae también un modo solitario, que es ir jugando los diversos reinos con alguna variante en las reglas y adelanto que no es nada sencillo de superar.

martes, 1 de febrero de 2022

Fecha para la toma de posesión

El 14 mi sitio estará con los coches. 
 
La semana pasada salió la lista definitiva con las adjudicaciones del concurso de traslado y yo respiré aliviado al ver que por la parte que me toca no varia con respecto a lo que me tocó en la provisional y me toca la plaza del parque móvil (que tiene como poderoso aliciente el de estar a 4 minutos de mi casa). Y nos han dicho también la fecha para la incorporación, que es el 14 de febrero.

A partir de ese día dejaré de ser titular de una plaza en Dependencia (a la que no he ido ni un día), para ser titular de esta otra, aunque de momento no me incorporaré, pues mi intención es seguir trabajando en comisión de servicios en la oficina de registro y atención ciudadana. Al menos hasta el siguiente concurso, luego ya se verá.