domingo, 31 de diciembre de 2023

Se acaba 2023

La tira me hizo gracia.

Otro año que se nos va, y otra nochevieja que me pilla con cero ganas (hoy ni voy a salir), pero lo bueno es que mañana ya será 2024, y se habrá pasado la parte coñazo de las navidades.

Pero hoy no toca hablar de 2024, sino del año que se termina, un año en el que se podría decir que ya hemos alcanzado la normalidad pre-Covid, y por fin en febrero pude volar en avión sin mascarilla. De hecho, hablando de vuelos, este año viajé un poco más, y por fin pude hacer algo de turismo en el extranjero, con la escapada a Glasgow. Escapada que hice para ver a un Bilbao Basket que este año me ha dado más disgustos que alegrías, pero así va el deporte. De salud bien, otro año sin saber lo que es coger una baja, y en el trabajo esta sensación extraña de saber que me voy pero sin saber cuándo. Mi previsión es febrero, a ver si acierto.

La vuelta a la normalidad también trajo consigo la nueva edición de las Omicron, si bien he de decir que entre la precipitación y el desgaste, así como estar oxidado tras 4 años sin hacerlas, hizo que no las pillara con muchas ganas. Eso, por suerte, no me ocurrió con TdN y Rolea, o con algunos de otros eventos a los que he ido este año.

Ha sido también año de record en mis visitas al cine, poniendo la marca en un difícilmente igualable 101, que veremos si consigo superar este año que entra.

Y creo que no me dejo nada.

sábado, 30 de diciembre de 2023

Jornadas Arkanas

El cartel.

El nombre del evento y el lugar en el que se celebra recordarán inevitablemente a las recordadas jornadas Arkadia de Mundo Mitagos, aunque estas Arkanas son en realidad un evento que, si bien, parte de un planteamiento muy parecido, justo es decir que es otro distinto, ya que incluso la gente que lo organiza no es la misma (estas corren a cargo de la asociación Golem).

Hecha la aclaración, toca contar que ayer me acerqué por ahí, pues siempre es una alegría ver que otros grupos también montan eventos, y pude jugar a un par de prototipos de juegos de mesa (This mine is mine y Castle Raiders) con su autor, una partida al recién comprado Cultivate y una inconclusa partida al Exit: Laberinto maldito

Después de que cerraran (no tienen horario nocturno, es lo malo) nos fuimos a cenar a Megapark y la vuelta fue un poco azarosa, pues el que llevaba el coche no se dio cuenta de que el parking en el que lo dejó cerraba, y tuvimos que darnos un buen paseo hasta el metro. Aunque eso ya se sale del ámbito de las jornadas.

Luego por la tarde me acercaré de nuevo, a ver qué tal.

viernes, 29 de diciembre de 2023

Último madrugón del año

Hasta 2024, despertador.

Algo hay que publicar en el blog, que mantener la inocentada en 29 de diciembre queda raro, así que dedicaré unas pocas palabras al que es el último día de trabajo del año. Un año que en lo laboral ha sido raro, ya que terminé el anterior sabiendo que mi plaza saldría a concurso, y aunque todavía no tengo fecha, mis previsiones son que en febrero cambiaré. Y es algo que me apetece, pero lo cierto es que cuando uno sabe que se va de un sitio, es difícil no tener la cabeza más fuera que dentro.

Hoy no me tocará, salvo cambios de cuadrante de última hora, atender en mostrador, sino que me tocará estar arriba, con la correspondencia, la bandeja de entradas (a ver si la bandeja del Juzgado no rompe la racha y sigue tan tranquila como el resto de la semana) y atender el teléfono, que es probblemente la tarea que más odio de cuantas desempeño.

Lo bueno es que ahora tengo unas pequeñas vacaciones y hasta después de Reyes ya no vuelvo. Y a partir de ahí casi una cuenta atrás.

jueves, 28 de diciembre de 2023

Capitán Bizkaia

El héroe que Bizkaia merece, no el que necesita.

¿Recordáis que os dije que en breve cambio de puesto dentro de Diputación?

Pues es verdad, pero lo que no os dije es que será para participar en un programa experimental de la Diputación Foral de Bizkaia, cuyos científicos, trabajando día y noche pero bien bien alimentados a base de mortadela con aceitunas, han desarrollado la versión vizcaína del suero del supersoldado, y cuando pidieron voluntarios, me presenté. 

Este suero trajo cambios físicos importantes, como la espectacular musculatura que luzco en la foto, una agilidad casi sobrehumana y unas capacidades cognitivas muy desarrolladas, con lo que soy capaz ded hacer los sudokus de dos en dos y puedo desayunar hasta tres veces al día. Además, el suero me ha hecho crecer varios centímetros, por lo que los usuarios parece que ya no me discuten tanto las cosas. Incluso me han prometido que están trabajando en una versión mejorada que me permitiría bailar sin tropezarme, pero ahí creo que están siendo demasiado optimistas.

Esto significa que pronto cambiaré el mostrador por las peligrosas calles y montes de Bizkaia, para misiones de protección, salvamiento y aporreado de nazis (que últimamente andan muy subiditos), y también que me tendré que coordinar con los represesentantes superheróicos de Alava (Celedonman, que maneja con maestría su paraguas lleno de gadgets y lanza con maestría naipes explosivos), Gipuzkoa (Aithor, un Basajaun del Goierri, que tiene un martillo y aunque no tiene poderes es muy bruto) y Navarra (Fermín, el hombre toro), que está pendiente de ver si se une a la iniciativa, para liderar a los Bengalaris, el primer supergrupo euskaldun.

miércoles, 27 de diciembre de 2023

Thimbleweed Park

¿Mulder y Scully?

Thimbleweed Park es una aventura gráfica de tipo "point and click" desarrollada por Ron Gilbert y Gary Winnick, cabezas visibles de la era dorada de las aventuras gráficas de LucasArts (Maniac Mansion, Indiana Jones, Monkey Island...) que, pese a ser de 2017, emula con mimo y acierto el espíritu y la estética de aquellos juegos tan de los 90, respetando el icónico menú, tan característico de la época.

La acción nos lleva a Thimbleweed Park, un enigmático pueblo de la América profunda, donde los agentes Ray y Reyes tienen que investigar un asesinato, cuya pista les llevará a ir descubriendo los rocmabolescos secretos de los no menos rocambolescos habitantes del pueblo.

Sin duda una canción de amor al género, y una apuesta segura para todos los que en su día gozaron con las obras maestras de Lucasarts. Thimbleweed Park no les decepcionará.

martes, 26 de diciembre de 2023

La víctima número ocho

Y encima sin poner OTA.

El principal aliciente para ver este thriller es que se desarrolla en Bilbao, y ver cosas ambientdas en la propia ciudad siempre tiene su encanto. En ella, un atentado terrorista se lleva la vida de ocho personas, y con eso arrastra al abismo al principal sospechoso (Omar) y todo su entorno, que tendrán que enfrentarse a estar en el disparadero, y en el caso de Omar, a un peligroso juego del gato y el ratón, pues la policía es casi el menor de sus problemas, pues detrás de todo esto se esconde una conspiración a mayor escala. Mientras tanto, una sagaz policía (la inspectora Laegui) y un curtido periodista (Eche) intentarán averiguar la verdad que hay de todo esto, la cual se irá viendo que huele mucho peor de lo que parecía al principio.

La serie no es ningún portento, pero es amena y la historia se sigue con interés. Tiene algunas cosas que chirrían un poco, pero maneja con equilibrio el peso narratvo del caso y el de las tramas personales. El nivel de actuaciones me pareció que era bastante mejorable, con algunas que me resultaron (siendo generoso) mediocres, pero en general la serie me funciona (teniendo en cuenta que tampoco le pedía gran cosa, claro), aunque el final se deja demasiadas cosas en el aire. No si lo hicieron con vistas a una segunda temporada, pero a estas alturas (la serie es de 2018) no tiene pinta de que eso vaya a ocurrir.

lunes, 25 de diciembre de 2023

Finde navideño

Regalo Olentzeril.

Soy una persona muy poco navideña. De hecho, es la época del año que menos me gusta, pero tiene de bueno que incluye días festivos, como el de hoy, que permiten alargar un poco el fin de semana.

El viernes, después de comer y echar la siesta, me fui a Miribilla, a disfrutar de la victoria de Bilbao Basket contra Girona, y después a cenar al Udon con mi señora novia.

El sábado, tras terminar el Thimbleweed Park, me fui hasta Santutxu, a comer unos tacos, y por la tarde rol, con el exótico pero interesante <busca el nombre, que lo tiene apuntado>, Chuubo's Marvelous Wish-Granting Engine, una propuesta francamente divertida de rol sin dados, que nos da para montarnos una historia muy épica. Por la noche me retiro a casa y me pongo un par de capítulos de La víctima número 8.

Domingo por la mañana. Aprovecho y me doy un paseo hasta la tienda de juegos de San Inazio, y vuelvo, comiendo algo por el camino. Cojo el autobús y me voy a Max Center a ver Godzilla, y vuelvo dando un paseo. Día de mucho andar, 27000 pasos. Por la noche me quedo tranquilamente en casa y aprovecho para terminar la serie que tenía empezada (se me acumulan las cosas a reseñar).

Lunes. No toca madrugar, pero no consigo dormir hasta más tarde de las 7:30, así que me levanto, me veo un par de capítulos de What If, me echo una minisiesta y me voy a casa de mi madre. Comilona (solo como langostinos una vez al año, pero cuando ocurre es una cantidad generosa), intercambio de regalos y a casa, a digerir las viandas. Después, y para terminar el fin de semana, a la lonja, donde jugamos a Lewis&Clark y Splendor (en ambas quedo segundo, hoy no era mi día).

Eso ha sido todo más o menos, mañana toca trabajar. Por suerte la semana solo es de 4 días.

domingo, 24 de diciembre de 2023

Godzilla: Minus one

No esperaba que me fuera a gustar tanto.

Lo bueno de ver una película con las expectativas bajas es que a nada que nos sorprenda un poco gratamente ya vamos a salir contentos del cine, y este es sin duda del caso de Godzilla Minus One, que lejos de ser la enésima película de bicho gigante destruyendo ciudades (que también), se toma la molestia de contar una historia, lo suficientemente interesante como para ganarse la atención del espectador, con sus dosis de acción, emotividad e incluso terror, y con personajes lo suficientemente bien construidos como para no estar deseando que venga el bicho y se los coma, sino que de verdad empatizas con ello.

El mito de Godzilla nace, si no me equivoco, del terror sufrido por la población japonesa en forma de bomba atómica en la segunda guerra mundial, y eso se traslada perfectamente a la película, que comienza en los estertores del conflicto bélico y se desarrolla sobre todo en ese Japón de posguerra, hundido moral y económicamente, totalmente devastado, pero intentando sacar fuerzas para salir adelante.

Es precisamente en ese contexto donde nos cuentan la historia de Koichi Shikishima, un ex-combatiente de dicha guerra, que a sus traumas personales, entre los que se cuentan el de sentirse como un traidor que ha deshonrado a su patria (con lo suyos que son los nipones para esto del honor) y el haber sido uno de los supervivientes de un ataque de la lagartija, que se ve de nuevo metido en la lucha contra el terible kaiju, y ve que la vida y la familia que, sin ser consciente de ello, se está forjando, están nuevamente en peligro.

Así contado, no difiere mucho de cualquier otra película de catástrofes, pero la película hace una apuesta tan arriesgada como es jugar a tomarse a Godzilla en serio, y vaya si sale bien. Consigue, o al menos conmigo lo ha conseguido, forjar un relato bastante verosímil de cómo habría sucedido si de verdad hubiera aparecido un monstruo de esas características en el Japón de ese momento histórico.  Además cuida muy bien las relaciones entre personajes, cómo Shikishima va creando lazos familiares con dos completas extrañas y su amistad con sus compañeros de trabajo, en lo que no sé si es un homenaje a la mítica Tiburón de Spielberg, que si es lo que pretendía lo consigue. Además, los personajes secundarios, repletos de carisma, consiguen que nos emocionemos cuando están en peligro, nos encariñemos con ellos y deseamos de corazón que se salven.

Cierto es que el final puede pecar un poco de ser estereotípico en exceso, rompiendo incluso un poco la suspensión de la incredulidad, pero entiendo que es una pequeña concesión, totalmente justificada, y que además nos conduce a un final que, no por esperado, es menos satisfactorio.

Como corolario, destaco una frase que me ha encantado, cuando uno de los personajes, ansioso de acción, y con la pena de no haber combatido manifiesta envidiar a su compañero más veterano (el capitán Akitsu, uno de los mejores personajes de la película) quien le responde con sabiduría algo parecido a "el honor es no haber estado en ninguna guerra".

Muy contento con la película, de verdad, y muy contento con haber dejado a un lado mis prejuicios de "pfff, una de Godzilla, qué pereza". 

sábado, 23 de diciembre de 2023

Victoria en casa, que ya tocaba

Fue día de gorros (hasta ocho tapones pusieron).

Había ayer un poco de miedo, pues la racha del equipo en liga, solo rota por la inesperada victoria en Valencia, no era buena. Y el rival (Girona), sin ser de los más duros de la competición, tampoco iba a ser un regalo, por lo que cabía esperar cuando menos un partido igualado.

Así fue, con un primer cuarto ligeramente dominado por Bilbao Basket (22-17, creo), que dio paso a una película de terror en la que no salía nada y a Girona le salía todo, por lo que llegó la cosa a estar con un feo 27-39. Sin embargo, yo estaba relativamente tranquilo, ya que quedaba mucho partido, y tampoco me estaba pareciendo que ellos fueran TAN superiores.

No me equivocaba, pues ya antes del descanso se enderezó un poco la cosa, llegando solo seis abajo al intermedio. Nada imposible de levantar, y de hecho así fue, y tras un tercer cuarto en el que el equipo local se mostró bastante superior, se llegaba al último cuarto dos arriba (58-56). Mejor eso que ir perdiendo, claro, pero lo ocurrido en los partidos precedentes (ir ganando todo el rato y acabar perdiendo), no daba espacio a tomarse demasiadas confianzas.

Lo cierto es que el último cuarto, aunque Bilbao Basket fue delante creo que todo el rato, tampoco estuvo exento de emoción, pues cada vez que se iba un poco en el marcador, venían las respuestas gerundenses, pero al final se pudo, terminando el partido 80-74, y sexta victoria para la mochila. Faltan otras cinco.

viernes, 22 de diciembre de 2023

What if...? Temporada 2

A ver por dónde nos sale esta nueva temporada.

Hoy llega, sin hacer demasiado ruido, la nueva temporada de esta serie de capítulos más o menos autoconclusivos, y que en la primera temporada tuvo capítulos muy buenos y otros infames (sí, Thor fiestero, te estoy mirando a ti), pero como es de Marvel, me lo voy a meter en vena sin rechistar. 

No sé qué tal estará, pero al menos tengo la certeza que peor que la segunda temporada de Loki no va a ser (sé que ha tenido éxito, pero para mí esa serie está entre lo peor y más aburrido del UCM, se siente).

jueves, 21 de diciembre de 2023

La antiludoteca

El logo.

En cierto modo un spinoff de La mano de Thanos, pues también está conducido por Owen, La antiludoteca es un podcast sobre juegos de mesa. Pero aquí ponen el foco en nuestras antiludotecas, que son todos esos juegos de mesa que tenemos por casa y todavía no hemos estrenado, pues bien es sabido que comprar juegos de mesa es una afición y jugar a juegos de mesa otra distinta.

Pero no está solo, ya que junto con él hablan, y nos van contando la actualidad lúdica Cris y el Capitán Lúdico, y en cada entrega nos van reseñando los juegos que van saliendo y haciendo peligrosas recomendaciones, cada cual con su estilo único e inimitable. No negaré que más de un juego ya ha caído por su culpa.

Con una frecuencia más o menos bimensual, sus entregas suelen andar en torno a un par de horas, y se pasan volando. Yo recomiendo a aficionados a los juegos de mesa, que le echen un tiento, y más si creen que tienen demasiados juegos en casa sin estrenar. Se les quitarán todos los complejos.

Disponible en Ivoox.

miércoles, 20 de diciembre de 2023

La espera

Lope cogió su fusil.
 
Una película para el lucimiento del gran Víctor Clavijo, La espera empieza siendo un drama costumbrista con aires de western en el que Eladio es un guarda forestal (lo de "forestal" es un decir) en la árida Andalucía rural de principios de los 70, que en un momento dado decide aceptar un soborno para hacer la vista gorda en su trabajo, con terribles consecuencias para él y su familia.

Entonces, lo que parece ser una historia de venganza a lo Peckinpah va mutando y jugando al despiste con el espectador, yendo de un lado a otro y sugiriendo cosas distintas en cada escena, logrando así cautivar a un espectador que no sabe qué se va a encontrar a continuación, sin saber muy bien qué nos quieren contar exactamente con ese ¿metafórico? descenso de Eladio a los infiernos, hacia un final que no tengo reparos en reconocer que no estoy seguro de haber entendido. Es más, casi diría que estoy seguro de no haberla entendido. Pero eso no es impedimento para disfrutar de la película, o de sufrirla cuando toca, que es una de esas películas que duelen y huelen, y transmiten muy bien las sensaciones. Algo lenta en ocasiones, y habrá quien la encuentre aburrida, pero creo que no dejará indiferente.

martes, 19 de diciembre de 2023

Retorno a Gloomhaven

¡Por fin!

No es la primera vez que menciono en el blog este juego, una campaña cooperativa de dungeon crawler (lo que viene siendo ir por una mazmorra matando bichos y saqueando tesoros), que al principio jugábamos de forma casi semanal, pero por dificultad a la hora de congeniar horarios, la hemos tenido paralizada meses. No sabemos cuándo será la siguiente, pero hoy se han juntado los astros y hemos podido jugar.

El escenario de hoy era volver a uno que nos dio en los morros en la última sesión (en realidad la única que hemos perdido) y aunque sufriendo, e in extremis, hoy sí hemos podido hacernos con la victoria. Eso sí, tras tanto tiempo sin jugar, estábamos perdidísimos, y yo ya ni me acordaba de lo que hacía mi personaje. Es más, no me acordaba ni de cuál era mi personaje, ese es el nivel.

lunes, 18 de diciembre de 2023

Wish: el poder de los deseos

Destronando a Pocahontas.

Esta nueva película de Disney venía precedida de críticas muy negativas, pero como está por desgracia muy de moda el review bombing (coser a valoraciones negativas y en masa a películas sin siquiera haberlas visto) y también lo he visto con películas que son buenas, decidí ignorarlas y darle una oportunidad, que además Disney suele sacar cosas majas.

Debo decir que, lamentablemente, en esta ocasión las críticas eran acertadas, y es que no exagero si digo que estamos ante la peor película de animación de Disney que haya visto en el cine, siendo una película hecha sin gracia, sin mimo y con absoluta desgana. Esto se puede ver end etalles como su diseño, con unas texturas paupérrimas, más propias de las películas de animación de Barbie, unos personajes planos y desdibujados, canciones de pegote (se salva el tema principal, que es lo único en lo que parecen haber puesto algo de esfuerzo, y por eso lo meten hasta en la sopa) y un guion vago, con una resolución paupérrima, que queda forzado hasta para el contexto de una película de animación infantil. Y de ese refrito de nombres y estéticas que es el ficticio reino de Rosas mejor no voy a hablar.

Todo indica a que querían sacar a todo correr una película para el 100º aniversario de Disney, y la han terminado haciendo a todo correr y sin prisas, para un resultado que huele a producto sin terminar. 

Entre lo poco positivo que se puede rascar está que tiene algún punto suelto que es gracioso, y que la estrellita era muy cuqui, pero en general, un despropósito que naufraga por todas partes. Y la idea de la escena postcréditos era bonita, pero se diluye al no conseguir que coenctemos con los personajes.

Lo dicho, tras 28 años en el trono, Pocahontas se ve obligada a ceder el testigo de peor película de animación de Disney. Esperemos que el reinado de Wish dure tantos años como el de la anterior.

domingo, 17 de diciembre de 2023

Finde prenavideño

A falta de otra foto mejor, la mesa de juego.

Se va acabando el año, y lo que acaba ahora es el fin de semana. El viernes, único día que trabajé esta semana, tuve por la tarde sesión (no muy fructífera) de la campaña de Ticket to ride Legacy, y luego paseo con cena (descubrimiento las pizzas del Dinámico, oigan).

El sábado por la mañana gimnasio y Thimbleweed Park, y de sobremesa me reveo, por enésima vez, Indiana Jones y la última cruzada. Luego una de lonja, con Lewis&Clark y Living Forest, grandes juegos ambos, antes de irme a casa. 

Domingo: por la mañana lo mismo que el sábado, pero con pintxopote antes de comer, y por la tarde al cine, a ver la decepcionante Wish, que ya comentaré por aquí. 

Eso ha sido todo.

viernes, 15 de diciembre de 2023

El maestro que prometió el mar

Entrañable y desgarradora a la vez.

Resulta inevitable acordarse de "La lengua de las mariposas", dado que ambas comparten lo de ser la historia de un entrañable maestro de escuela en la España rural inmediatamente anterior a la guerra (y su fatal desenlace), pero El maestro que prometió el mar no tiene nada que envidiar a la película de José Luis Cuerda.

Aquí se nos cuenta la historia de Antoni Benaiges, maestro de escuela destinado a una pequeña localidad de Burgos (Bañuelos de Bureba), que fue represaliado por los falangistas por sus pculiares métodos de enseñanza y por sus ideas abiertamente izquierdistas, a quien aquí da vida un entrañable Enric Auquer (que últimamente especializado en hacer papeles de tío majete).

La película funciona en dos frentes. Por una parte en 2010, donde Laia Costa es la nieta de uno de los que fueron alumnos de Benaiges, y está investigando la desaparición de su abuelo, y por otra la historia principal, que empieza con la llegada de este al pueblo y termina con... bueno, es fñacil de imaginar.

Pese a lo triste de la historia, y más sabiendo que ocurrió de verdad, es tremendamente disfrutable, con unos personajes encantadores y una ternura que logra emocionar, sin perder gancho en ningún momento (tal vez las escenas del presente, sí que son menos interesantes), y el final, pues uno va con la intención de que no se le escape ninguna lágrima, pero la película tiene una opinión distinta.

Recomendable.

jueves, 14 de diciembre de 2023

Improvisada sesión de juegos de mesa

Para cenar ensalada... de puntos.

Esta historia es un poco el equivalente lúdico y no etílico a "estaba de retirada, y cuando salí del bar que ya cerraba, me encontré con unos amigos y me liaron", pues estaba yo de retirada y me he acercado a la tienda de juegos de mesa que estaba cerrando (no hay manera de que esto no suene a eufemismo) cuando me he encontrado con unos amigos, que tenían plan de cena y juegos de mesa, y me han invitado. 

Dado que la idea era no terminar muy pronto, aunque mañana toca madrugar, me he apuntado, así que ahí hemos tenido sesión con Ensalada de puntos (me han dado hasta en el DNI) y El ansia, donde he ganado una apretada partida. Todo ello con extra de arroz con curry, así que plan improvisado guay.

miércoles, 13 de diciembre de 2023

La Navidad en sus manos

Pinta a cutre que esta vez no miente.

Me suelen hacer cierta gracia, lo reconozco, las comedias familiares de Santiago Segura, pues siempre tienen su puntito de gracia, alguna coña con peor baba que otra y su girito más o menos ingenioso. Lamentablemente, en esta película no se da ninguna de esas cosas, siendo excesivamente infantil y plana, con una historia deslavazada, poca gracia y unas interpretaciones en general bastante pobres.

Aquí nos cuentan la típica historia de granuja de medio pelo con corazón de oro, que está divorciado tiene y un hijo al que quiere con locura pero decepciona constantemente. Un día  ese granuja, atropella por accidente a Papá Noel, y recibe como encargo, por parte de este el de sustituirle en Nochebuena, para lo que tendrá que aprender, entre otras cosas, a ser mejor persona. 

¿Se podría haber sacado algo mejor de esta idea? No lo sé, pero difícilmente podía haber sido peor el resultado. O es que, sencillamente, la película no era para mí.

martes, 12 de diciembre de 2023

Crónicas Rolea 2023 (2)

Perlitas de sangre.

Reseñados miércoles y jueves, es el turno del viernes. Aproveché para dormir hasta tarde, de modo que por la mañana no jugué a nada, pero estuve tan a gusto de tertulia cafetera hasta la hora de comer, y por la tarde una descacharrante partida de Pasión de las pasiones, con momentos como siempre hilarantes.

Por la noche me iba otra vez al rol de mesa, y probaba el Y-System con El reencuentro, una historia de terror ambientada en un monasterio de Rascafría y protagonizada por un grupo de amigos que se van de preboda. Gran partida, pardiez. 

El sábado por la mañana tampoco juego a nada, y por la tarde dirijo Pulp Fiction, partida a la que le tengo mucho cariño pero a la que se le empiezan a ver algunas costuras (la escribí en 2011) y por la noche la gran sorpresa, Fiesta pijama en casa de Rapunzel: el musical (sí, tuve que cantar), partida de la que esperaba poco, pero que termina siendo una experiencia divertidísima y desternillante.

Y esas han sido las partida, con un saldo muy positivo, y en el aspecto lúdico más contento que en TdN. Ahora, a pensar en las de 2024.

lunes, 11 de diciembre de 2023

Crónica Rolea 2023 (1)

Creando mundos con Microscope.

Vamos al lío, o lo que es lo mismo, hablar del desarrollo del evento.

Miércoles

Aunque en estas jornadas he dirigido menos de lo que suelo, y solo he llevado dos de rol en vivo, fue precisamente con una como empecé. Battlestar Galactica: Escape de Aerilon, una partida que no es ningún portento, y que de hecho escribí en una sola mañana, pero que sirve para pasar el rato durante hora y media.

Por la noche tocaba ser una reina del grito en (You´re not) The final girl(s), en la que consigo sobrevivir, a pesar de los intentos del asesino. Sin embargo, estaba tan reventado de ese viaje, que por primera vez en años, ese día no bajo de fiesta tras la partida de la noche.

Jueves

No haber salido a la noche me permite levantarme razonablemente pronto y probar Microscope, un juego de creación de mundos que recordaba poderosamente a El año tranquilo

Por la tarde me fui a las trincheras de la primera guerra mundial, para ser un soldado alemán en la tregua navideña de Feliz Navidad, una partida muy amable y un oasis de costumbrismo en el mar de dramones y conspiraciones. Muy a gusto. Por la noche jugué Luz de Luna, que si bien no me llegué a aburrir del todo, no me enamoró, ya que su planteamiendo demasiado puzzle no suele ser mi favorito.

Ese día, por supuesto, sí que bajé al Pepe´s.

domingo, 10 de diciembre de 2023

Regresado de las #Rolea2023

Pos se han acabao.

Ya de vuelta en casa, reventado tras el viaje, pero feliz como una perdiz. No voy a detenerme a explicar lo mucho que significan las jornadas ROLEA para mí, pues poco puedo añadir que no haya dicho ya. Fiel a las tradiciones, hoy hablaré solo de la ida y la vuelta, dejando las crónica de las jornadas propiamente dicha para futuras entradas.

Esto empieza el miércoles cuando a las 6 de la mañana el cruel despertador me dice que tengo que estar a las 7:00 en Abando, para coger el tren. Así que me ducho, me visto y voy a la estación, con intención de coger un tren, aunque RENFE tiene una opinión distinta, ya que no hay ningún tren para Madrid y me comunican que por obras en el tramo hay que ir hasta Miranda en autobús y ahí seguir el recorrido.

Un trayecto incómodo de narices, que por suerte solo dura una hora, me deja en un sitio rodeado de nuebla, que debe de ser Miranda. No nos dan ninguna explicación y los pasajeros nos seguimos unos a otros, hasta llegar a la estación, donde el panel informativo dice una cosa y el tren otra. No se ponen de acuerdo con el andén, pero optamos por hacer caso al tren, que es más grande.

El Miranda-Madrid ni tan mal, salvo por la parte en que llega con quince minutos de retraso, algo que no sería tan grave de no ser porque de los 66 minutos que tenía para hacer el trasbordo, me quedaba ahora con 51. Porque claro, hay que ir de Chamartín a Atocha.

Llego a Cercanías para ver marcharse el tren que conecta ambas estaciones. Más tiempo que se consume. El siguiente llega tarde, la cuenta atrás se va agotando. Va tan lleno que tarda un par de minutos en arrancar. Conclusión: llego a Atocha a las 12:20 (mi tren salía a las 12:35). Pero llego a la estación de Cercanías, todavía tengo que llegar a lo que viene siendo la estación gorda, Puerta de Atocha.

Corro hasta que llego a los tornos. No puedo entrar porque no leen mi QR, y ningún ser humano a quien pueda pedir sopitas. Opto por colarme detrás de una persona que sí pasa y seguir corriendo, y haciendo gala de mi gran capacidad atlética, consigo llegar al control de equipajes... a las 12:30, y hay cola.

Una pareja en la misma situación que yo se une a mi festival de miradas asesinas cuando la empleada que controla nuestros billetes nos dice con retintín "hay que procurar venir con más antelación", y corremos como gacelas. Entro en el tren, a las 12:33, y este sale puntual a las 12:35. Matchball salvada.

Una vez en Antequera, comparto taxi con un amigo con el que coincido en el tren y antes de acreditarnos, comemos en el pueblo, no sea que nos cerraran la cocina. Así que comemos, vamos al CEULAJ, tomamos posesión de las habitaciones y...

Es domingo por la mañana. Me despierto razonablemente bien, y dentro de la hora del desayuno, así que aprovecho para coger energías, que espera un día duro.

Primero me acercan en coche a la estación de Antequera, donde llego con poco margen, pero el suficiente para no agobiarme, y voy hasta Madrid, en un vagón en el que unos niños tienen a bien pasarse el viaje pegando gritos, bajo la impertérrita mirada de sus responsables. 

En el tren aprovecho también para llevar a cabo un cambio de planes, y es que la idea original era coger el autobús que salía de Madrid para Bilbao a las 15:00, y ya tenía el billete cogido, pero no quería repetir la jugada del miércoles, de modo que he mirado si había alguna alternativa en Blablacar y he visto uno que me cuadraba bien, y que salía a las 15:30, lo que me ha dado tiempo a ir sin tanta prisa e incluso comer algo. No estoy seguro de si habría podido llegar a coger el autobús de las 15:00, creo que sí, pero prefiero quedarme con la duda y ya de paso haberme gastado 45 euros menos.

El viaje en Blablacar cansado, que son algo más 4 horas, pero agradable. Y por fin, después de esta maravillosa epopeya, estoy de vuelta en casa.

jueves, 7 de diciembre de 2023

Noche de paz (Silent Night)

No confundir con esta otra

John Woo, uno de los directores más icónicos del cine de acción de Hong-Kong, nos trae esta historia de venganza, pandilleros y muertes a go-go, que a pesar de tener escenas maravillosas no me terminó de funcionar y se me hizo aburrida, precisamente por la principal característica de la película, y es que el protagonista es mudo y la película no tiene diálogos.

Esto va de un tipo al que un tiroteo fortuito entre pandilleros hace que su hijo de siete años termine muerto y él con una bala en la garganta, al borde de la muerte. Consigue sobrevivir, pero pierde la capacidad de hablar, y como es de esos que no saben aguantar una broma, decide pasarse el año entrenando y documentándose, para convertirse en una especie de Punisher y provocar un severo pandillericidio.

Pasa el año y se pone manos a la obra. Me gustó que hay escenas muy buenas, y me gustó el detalle de que a pesar de haberse pasado el año entrenando, no es ningún profesional, y comete errores de novato, lo que da pie a peleas muy bien rodadas. No me gustó que la falta de diálogos le impone un aire plomizo y las peleas y tiroteos terminan resultando repetitivos, y la escena final, con pinta de videoclip, termina convirtiéndose en un trámite que deseas ver terminar.

Tiene sus cosas, pero en general diría que no me funcionó.

miércoles, 6 de diciembre de 2023

A las #rolea2023

Si todo va bien, debería estar montado en uno de estos. 

Retorno a Mollina, mi refugio y mi lugar de diversión, durante dos fines de semana al año. Otra vez a las Rolea, aunque estas me han pillado un poco a contrapie, tanto por las partidas (esta vez solo llevo dos vivos y una de mesa) como por la forma de ir, que no será avión (estaba exageradamente caro, por mor del puente) sino tren. Me fastidia saber que hay gente que no va a poder estar y me apetecía ver, pero seguro que, como siempre, me lo acabo pasando como un enano.

A la vuelta contaré qué tal.

martes, 5 de diciembre de 2023

Grand Theft Auto VI Trailer 1

Click, click, comprar.

Hoy han sacado el trailer de la siguiente entrega de la que es mi saga de juegos favorita, anunciando que GTA saldrá en 2025 (¡12 años después del V!). 

La noticia me pilla con ilusión, y también con recelo, pues mi miedo es que GTA VI esté orientado al multijugador, y a la campaña no le hagan ni caso. Pero si no es así, uy como no sea así...

También veo que comentan que el precio de salida será muy caro, pero eso honestamente no me preocupa. Primero porque si lo compro será con consola nueva de por medio y segundo porque si lo disfruto tanto como he disfrutado los GTA anteriores, valdrá lo que me pidan por él.

Pero lo dicho, no me quiero ilusionar demasiado.

lunes, 4 de diciembre de 2023

8 apellidos marroquís

En realidad no tiene nada que ver con Ocho apellidos vascos.

Da un poco de rabia el insulto a la inteligencia que supone que imiten título y estética de otra película con la que no guarda absolutamente ninguna relación para ver si así rasca en taquilla, y tampoco le hace ninguna justicia el trailer, que destila ranciedad y vergüenza ajena por los cuatro costados. Sin embargo, una vez vista la película, lo cierto es que no está tan mal. No deja de ser la típica comedia romántica de choque cultural, con todos los estereotipos y clichés de comedia romántica de choque cultural, una de esas películas que no llevas ni 15 minutos viendo y sabes cómo va a terminar. Pero valorada en su justa medida, funciona.

Dos richachonas, rancias y derechosas, se van a Marruecos a cumplir la última voluntad del marido de uno y padre de la otra, y se les pega el ex-novio de una de ellas, un cayetano de la vida, cortado por el mismo molde. No llegan al nivel de parodia pero casi, y eso generará todo tipo de situaciones rocambolescas, algunas bochornosas, y la cosa cambia cuando aparece Hamida, un personaje con el que tienen una relación que no sospechan (nada que no se intuya en cuanto aparece en pantalla, eso sí), y que se unirá a su loca aventura.

En una película que va de menos a más, el cutrerío se va disipando a medida que avanza (no digo que desaparezca, ojo, digo que se diluye) y nos da una película funcional, con sus momentos divertidos (con alguno reconozco que me reí) y un final buenrollista, muy del género. Totalmente irreal y sin sentido, pero eso a fin de cuentas, es propio del género.

Sin ser gran cosa, al menos consigue ser mucho mejor de lo que parecía que iba a se

domingo, 3 de diciembre de 2023

Finde de ver a mucha gente

 Con los visitantes levantinos.

Termina un fin de semana lleno de cosas. Poco reseñable el viernes, con siesta y cine (8 apellidos marroquís), ya que me tenía que retirar pronto. ¿El motivo? El expuesto ayer, que el sábado había que madrugar, para cuidar el examen. Aprovecho, eso sí, para descargar y probar el psicodélico McPixel3.

El sábado, tras el examen, llegado a casa y malcomido, me doy una ducha y me echo la siesta. Consoleo un poco más, y a las 19:00 me voy al Covent Garden, donde el amigo Víctor celebraba su 30º cumpleaños. Estoy a gusto, pero el cansancio me hace retirarme pronto, y para las 23:00 estoy en casa.

Hoy domingo, por la mañana quedo con el amigo Borja, que venía de Elche, de visita con su señor novio, así que aprovechamos para quedar a comer, y por la tarde me voy a la tienda de juegos de San Inazio, donde el amigo Pablo tenía su despedida, ya que se nos vuelve a Valencia.

¿Y qué es lo malo de quedar en una tienda de juegos de mesa? Que uno es débil y compra cosas. Hoy le ha tocado el turno al simpático Boop, que luego he probado con mi señora novia, y le ha gustado bastante.

Eso ha sido todo, un fin de semana corto, pero que antecede a una semana laboralmente corta.

sábado, 2 de diciembre de 2023

Vigilando futuros funcionarios

 Parecen pocos, pero cuando eres uno de ellos, te parecen demasiados.

No es habitual que por trabajo madrugue un sábado, pero hoy ha tocado. Bueno, ha "tocado" entre comillas, y es que si he tenido que ir hoy es porque me apunté como voluntario para ir a cuidad el examen de administrativos, algo que desde luego es agotador, pero ni punto de comparación con lo que es hacerlo.

El examen hoy constaba de dos partes, ambas de test, la teórica y la práctica (como cuando me examiné yo, pero ambas el mismo día). Sin embargo, en vez de darles los dos cuadernillos de preguntas a la vez que sería lo suyo, una vez terminan el primero tienen que esperar (y no poco, los que menos una hora, los que más, dos horas y pico) hasta hacer el segundo, en lo que se convierte en un cruel y, sobre todo, innecesario suplicio. Espero que a esto le den una vuelta, porque me consta que esto ha generado mucho descontento entre la gente que se examinaba (yo me habría encabronado, la verdad), pero al menos tienen la cosa de que, para bien o para mal, ya han pasado el trago y solo les queda esperar las notas.

viernes, 1 de diciembre de 2023

Los juegos del hambre: Balada de pájaros cantores y serpientes

62 años antes de Los juegos del hambre.

Puede que sea por influencia del mal regusto que me dejaron las películas de Animales Fantásticos (como esta, precuela de exitosa saga de películas, basada en exisosa saga de literatura juvenil), pero lo cierto es que esta película me daba un poco de pereza, aunque me animé a verla y mi sensación ha sido en general positiva.

Nos cuenta básicamente, la juventud de Coriolanus Snow, el malo malísimo de Los juegos del hambre, a quien daba vida Donald Sutherland, y cómo fue su primera toma de contacto con los infames juegos mortales (aunque yo pensaba que iba a ser una película sobre cómo nacieron estos), así como de su relación con Lucy Gray Baird, y cómo llegó a convertirse en el villano que sería.

La película es, en general, muy entretenida, pero viéndola da la sensación de que esto daba para dos películas y lo han juntado un poco a lo bruto, pues los dos primeros actos nos cuentan una historia, la que se intuye en los trailers, y el tercer acto, un poco epílogo, nos cuenta otra totalmente distinta, y que a mí por lo menos me pillaba a contrapie, un poco como si la película ya hubiera terminado y no quisiera terminar de irse, siendo el tercer acto un bajón gordo con respecto a los dos primeros, sobre todo por la sensación de que la prisa precipita muchísimo el cambio en el protagonista, algo que debería haber sido más gradual. 

Por lo demás, conserva la magia y la esencia de las películas de Los juegos del hambre, y aunque obviamente no es una película redonda, el resultado es cuando menos digno. 

jueves, 30 de noviembre de 2023

Cosecha de Rolea

Eso jugaré.

El martes fue el reparto de actividades, y ayer fue un poco caótico en ese sentido, dado que ha habido problemas con las actividades (en primera instancia, me había tocado plaza en tres actividades simultáneas del miércoles a la noche y nada más), pero una vez hechos los ajustes, eso es lo que jugaré. (You are not) the final girl(s) es un vivo sobre el género slasher, Fiesta pijama es una gamberrada de princesas Disney, Feliz Navidad va sobre la tregua de Navidad de la Primera Guerra Mundial y Luz de Luna no lo sé, me dejaré sorprender. 

Por la parte que me toca, con Battlestar Galactica: Escape de Aerilon no tuve problema, pero Pulp Fiction, entre gente apuntada que en realidad no estaba inscrita a las jornadas, gente que aparecía y desaparecía y algún fallo organizativo, ha sido una locura, pero parece que ya tengo todo repartido, a falta de mandar los personajes.

miércoles, 29 de noviembre de 2023

Glasgow: día 4

Escocia, volveré.

Todo tiene su fin, y mi viaje a Glasgow no era la excepción. Pero eso no significa que el jueves no hiciera cosas, y eso que aproveché para dormir casi hasta las 10 (y porque había que desayunar, que si no, no me levanto de la cama hasta el checkout).

Abandonado el hotel, me fui a la ribera del Clyde, pero en sentido Este, para llegar hasta donde supuestamente estaba el monumento a Dolores Ibarruri, aunque debía de estar cerrado o trasladado, porque no vi nada. Sí una catedral que me pareció bonita y algo raro en Escocia: un cielo azul. 

Por la cosa de ir sin prisas, voy con margen al aeropuerto (diez libras me zumbaron por el autobús), y espero algo más de lo previsto, pues el avión tenía media hora de retraso, así que aprovecho para comer algo.

Llego sin mayores incidencias al aeropuerto Amsterdam sobre las 16 de la tarde, y dado que mi siguiente vuelo es a las 20:30, me cojo el tren, para dar un paseíllo por la ciudad. El paseo es corto, pues el tren tarda en aparecer más de lo previsto, y para la vuelta quería ir sin margen, estando sobre las 18:30 en el aeropuerto.

Y menos mal, porque cuando estoy en el andén esperando al tren para Schipol (no recordaba la estación de tren de Amsterdam tan caótica), anuncian en el panel que cancelan el tren al aeropuerto. Controlemos el pánico, que no son ni las 18:00. Respiro con calma y veo que hay otro a las 18:10 en el andén de al lado. Salto de fe y a esperar.

A las 18:00 aparece un tren, sin nada que indique a dónde va, pero por fuerza tiene que ser el del aeropuerto. Gente con maletas entra en rebaño al tren, debe de ser ahí. Una vez dentro, el operario me confirma que va a Schipol.

Me siento y espero.

18:05, 18:10, 18:15, mierda el tren debería haber salido ya... 18:20, sudores fríos... A las 18:25 se pone en marcha y una jerigonza habla por megafonía. Un discurso en un inglés inaudible. Salta en español, y cito textualmente: "el trensito tiene un retrasito de doce minutitos". Lucho contra la risa.

Llego bien al aeropuerto, y aunque es grande y me pierdo un par de veces, apenas hay cola en el control de pasajeros y me planto en la puerta de embarque con un generoso margen de 50 minutos. Espero y el avión me lleva de vuelta al aeropuerto Bilbao, donde me vuelvo a encontrar con los conocidos del partido y, compartiendo taxi, vuelvo ya a casa.

Una bonita experiencia y ganas de repetir.

martes, 28 de noviembre de 2023

Napoleon

Liberté, Égalité, Fraternité, Bostecé.

Tenía grandes esperanzas puestas en esta película, pues el trailer tenía buena pinta y se basa en un personaje cuya vida y hazañas pueden dar muchísimo juego, y aunque las primeras críticas que iba viendo eran muy negativas, conservaba cierta ilusión por verla cuando fui al cine. Esa ilusión no tardó en disiparse.

Con un ritmo para mi gusto demasiado plomizo, la película se me hizo muy aburrida, con una constante sensación de desgana, yéndose a veces casi a lo monocorde, dentro de ese ambiente sombrío, al que no ayuudaba ese filtro "gris medioevo", e incluso Joaquin Phoenix estaba bastante soso, fuera del personaje.

Narrativamente se hacía un tanto caótica, dando saltos entre hitos históricos, a vecescomo si fuera una mera concatenación de escenas más o menos potentes, alternando con el soporífero amorío de Napoleon con Josefina, y en el que las batallas pretendían ser espectaculares (alguna hay, todo hay que decirlo), pero se nos muestran casi sin contexto, como si este no fuera relevante. En general me daba muchas veces la sensación de película vacía, en la que los decorados parecían cascarones huecos, y detalles como reducir Moscú al tamaño de la plaza principal de Villabotijos.

También ha recibido varias críticas por su falta de rigor histórico, del que no me puedo extender mucho al no ser un experto, pero lo que más me chirrió fue en realidad la película nos pinta al reconocido como uno de los mayores genios de la estrategia militar de la historia como si fuera un tuercebotas que solo sabía cagarla, que ignoren por completo su guerra con España y también que su destierro a Elba parezca cosa espontánea del Gobierno Francés, como quien destituye a un entrenador de fútbol por perder muchos partidos (obviando lo de que París fue ocupado por la coalición y tal). 

Pero lo peor es que, en general, bastante peñazo.

lunes, 27 de noviembre de 2023

Glasgow: día 3

La universidad se yergue ominosa, posando para la foto.

El día anterior (el del partido) había sido muy andarín, de modo que me apetecía algo más pausado. Así que tras levantarme sin proisas y desayunar, me puse en marcha y tiré por la ribera del Clyde hacia el Oeste, llegando así al museo Kelvingrove, y como era gratis, me metí a pasar ahí la mañana. Este museo me recordó a una versión en miniatura del Brittish, la National Gallery y el Museo de Historia Natural de Londres, con su parte de bichos, su parte de piedras y su parte de cuadros.

Luego fui a ver la universidad, cuyo exterior es espectacular (era como ver Hogwarts) y me fui a comer, a un resaturante indio que me habían recomendado, cerca de Ashton Lane.

Ya comido, voy volviendo al centro y me acerco a curiosear a la gurdwara (templo sij), donde me tengo que descalzar y poner una bandana, con tan poco estilo que más parecía un cosplay de Doña Rogelia, pero suficiente para entrar.

Vuelvo al hotel, para descansar un rato, y luego vuelvo al callejeo, visitando entre otra cosas, tiendas de juegos locales, que la cabra siempre tira al monte. También compro algún suvenir de regalo y, tras dejar las bolsas en el hotel, salgo de nuevo a cenar. Como no tengo mucha hambre, me atrevo con esta aberración contra las sagradas leyes de la naturaleza.

Es una barrita de Mars rebozada.

Para cerrar el día, me doy otro paseo por el bullicioso Glasgow nocturno, ubico la parada del autobús para el aeropuerto del día siguiente y me retiro a dormir.

domingo, 26 de noviembre de 2023

Finde postGlasgow

En el evento de Marvel Champions.

Como el viernes lo dediqué a volver de Escocia, este fin de semana toca empezarlo en sábado. Por la mañana no hice gran cosa, básicamente descansar, hacer la compra y cocinar, y por la tarde fui a la lonja a echar un Ark Nova, donde gané. Peor suerte hubo luego en Miribilla, donde el Bilbao Basket perdió estrepitosamente contra Unicaja, tras lo que volví a la lonja, para echar unos juegos de mesa, con uno cuyo nombre no recuerdo (me recordaba a El espía que se perdió) y al Hanabi.

Hoy domingo me he tenido que levantar precipidadamente cuando al despertar he visto que eran las 9:50, y es que había quedado a las 10:10 en San Inazio, pues había un evento de Marvel Champions, con una curiosa mecánica de crossover con DC. Ironman, Agente Venom, Ironheart y Mariposa Mental han sido apaleados vilmente por el Supervisor. Luego hemos intentado hacer un Angel/Spiderham/Capitana Marvel contra Kang, pero no nos ha dado tiempo a terminar la partida.

De ahí, comida con mi señora novia, tarde de paseo y a casa, que mañana toca vuelta al trabajo.

sábado, 25 de noviembre de 2023

Glasgow: día 2 (Visita a Stirling)

Me podrán quitar la vida, pero no la pechada que me pegué hasta subir ahí.

El mirécoles fue el día grande, y no solo por el partido, sino porque fue un día especialmente andarín. Me levanté sin demasiadas prisas, para poder aprovechar el desayuno del hotel, y aunque mi idea original era estar el miércoles por Glasgow e ir el jueves a Stirling, decido cambiar de planes, así que me voy a la estación y cojo el tren.

Sobre las 10 de la mañana aparezco en Stirling, antigua capital de Escocia, y me encuentro un pueblo precioso, con casas muy de postal, y una visita muy recomendable para cualquiera que visite Escocia. 

Subo hacia el castillo, por una cuesta bastante pronunciada, admirando las callecitas y casas locales, y cuando estoy en el castillo, decido ahorrarme las 20 libras de la entrada y opto por perderme por los andurriales agrestes, hasta terminar en lo alto de una loma, donde está la piedra en la que antaño se celebraban las ejecuciones públicas. Afortunadamente, un lugareño me informa de que ya no está en uso. Oye, un alivio.

Charlando, le pregunto por una especie de torre que se ve a lo lejos, y me dice que es el monumento a William Wallace, que está a una media hora andando.

La torre es lo del círculo rojo de la derecha.

Sigo andando, y cruzo el río sobre el que estaba el famoso puente de Stirling (el de la batalla de Braveheart), y camino durante un rato largo. Llego hasta el sitio del memorial, donde veo con agrado que hay una lanzadera gratuita que te sube hasta arriba. Más por un tema de tiempos que de energía (quería comer a una hora decente) hago uso de ella y llego hasta la torre. Subo los 225 escalones de una angosta escalera de caracol (no vayáis con mochila) y arriba disfruto de unas vistas espectaculares, aunque con un viento que parecía que me iba a hacer volar.

Vista la torre, bajo por el paseo, muy agradable, y cuando estoy ya abajo, cojo el autobús, que empezaba a tener hambre, pero me arrepiento de mi decisión cuando no solo me cobra 4 libras por un trayecto de 4 kilómetros, sino que a medio camino el autobús decide no funcionar y dejarnos tirados en mitad de la carretera.

Llego a Stirling, donde voy a comer a un indio, y ahí pruebo unas pakoras de hagis que no es que estuvieran buenas, es que hacía que uno se planteara quedarse a vivir en ese pueblo.

Volvería a Stirling a por más.

De sobremesa, me doy un paseo por la antigua cárcel de Stirling, callejeo un poco más, sobre todo por su precioso cementerio, y vuelvo al tren, que quería estar en Glasgow a una hora razobable (no olvidemos que a las 19:30 tenía partido, y no era precisamente cerca). El tren llega con retraso y encima se queda parado un rato a mitad de camino, pero llego a Glasgow con tiempo para ir al hotel sin prisas, cambiarme y tirar para la estación de tren.

De la odisea que fue llegar al pabellón ya hablé aquí, y afortunadamente volver fue menos azaroso, y ya una vez en Glasgow me fui a tomar una con los bilbaínos, a un pub con música en directo y cócteles ricos. Sin duda, un día completito.

viernes, 24 de noviembre de 2023

De regreso de Glasgow

Haciendo escala en Amsterdam.

Pues ya estoy en casa. Tras esta aventurilla por tierras escocesas, sobre la que ya me iré explayando en entradas sucesivas, por fin he llegado a casa, contento pero con una experiencia más (y menos dinero en la cuenta, pero sabíamos a lo que íbamos).

En cuanto a la experiencia de viajar solo, pues la verdad es que tiene sus ventajas, y es que al no tener que coordinarte con nadie puedes ir totalmente a tu pedo e irte inventando y cambiando los planes sobre la marcha. ¿Que quieres parar? Paras. ¿Que quieres ir a ver ese sitio que se ve a lo lejos y está a tomar por culo? Vas. ¿Que a mitad de camino cambias de opinión y haces otra cosa? La haces.

Evidentemente es mejor cuando tienes otra persona con la que compartir el viaje (en este caso una persona concreta y determinada, que ya sabe que lo es, y no hay que dar más explicaciones), pero esto la verdad es que ha tenido su punto. Pensaba que iba a ser más aburrido, o con muchos ratos muertos y nada más lejos de la realidad.

jueves, 23 de noviembre de 2023

Glasgow: día 1

Aunque en realidad me voy mañana.

Por ir contando las cosas con un poco de orden, y hecha la salvedad ayer con el partido y sus peripecias accesorias, procedo a narrar de forma cronológica el viaje.

El martes un terrible madrugón, necesario para estar a las 6 en el aeropuerto. Paso las puertas de embarque y cuando estoy ya subiendo al avión, me escribe un conocido (Thor), para decirme que me ha visto en la cola. Hablando, resulta que él también va a Glasgow, por un tema de curro, y que el martes va a ir al partido. El mundo es un pañuelo.

Primer avión, bastante cómodo, trasbordo el Amsterdam y segundo vuelo aún más cómodo (KLM, con espacio para las piernas). Al llegar a Glasgow, con la comodidad de compartir taxi, cada uno ya se va para su hotel.

Me registro, tomo posesión de mi habitación y salgo a comer, que ya son horas y hay hambre. Elijo mal el sitio y termino en un supuesto bufet de pizzas, donde la variedad, la calidad y la cantidad brillan por su ausencia (no así el precio, que se iba a las 16 libras). Era tal el desastre, que habiendo probado solo dos porciones, me hago el tonto y me escapo sin pagar. Ando un poco más, y termino en un Subway, donde al menos sabia qué me iba a encontrar.

De ahí subo hasta la Necrópolis, para disfrutar de las vistas. Me paso también por la catedral, que está cerrada, pero veo el pequeño museo que tienen sobre religiones. Y cuando salgo, aunque son las 16:30, ya es noche cerrada, aunque no me apetece encerrarme tan pronto, asi que tiro a andar. Un buena caminata me lleva hasta el Hidden Lane, una zona muy agradable, y al volver paso por una tienda de juegos (la cabra tira al monte), donde estoy un rato charlando con su gerente, Vlad (que como era ruso y no escocés, podía entenderme). Y como la tenia también bar, aprovecho y ceno ahi. Hay que colaborar con estos negocios.

Ya de retirada al hotel, como aún era demasiado pronto para acostarme (estaba que me caía, pero si me acostaba a las 9, veía que a las 5 iba a estar ya como un búho), así que subo un rato a la cafetería del hotel, hago un poco de tiempo y ya me retiro, agotado por el viaje y las caminatas.