El dueto León-alterio sostiene muy bien la película.
El cartel ya nos indica a gritos que esto va a ser una comedia genérica española. Y no miente, pero no es menos cierto que es un subgénero que yo disfruto mucho, así que ahí que voy siempre, atraído como las moscas a la miel. Y dentro de ese contexto es como valoro estas peliculas que, con sus luces y sus sombras, casi siempre me entretienen.
Aquí es una buddy movie, con estructura de comedia romántica, que juega con el clásico cliché de dos caracteres incompatibles que por circunstancias de la trama se ven obligados a entenderse y cooperar, y finalmente terminan entendiéndose. Aquí la premisa es que ambos tienen que ir a una estación de esquí, donde su mujer ha sufrido un accidente, y cuando están ya ahí descubren que esta lleva una doble vida y estaba casada con ambos a la vez.
Siguiendo muchos de los esquemas esperables, la película nos va llevando por situaciones imposibles, cuya función es servir de vehículo a la relación entre los dos protagonistas, llevándonos por donde es de esperar, con giros previsibles pero funcionales y un innecesario plot twist final que no aporta gran cosa, ya que se ve venir a kilómetros. Pero, lo dicho, dentro de lo que cabía exigirle, me ha funcionado bien.
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