viernes, 24 de noviembre de 2023

De regreso de Glasgow

Haciendo escala en Amsterdam.

Pues ya estoy en casa. Tras esta aventurilla por tierras escocesas, sobre la que ya me iré explayando en entradas sucesivas, por fin he llegado a casa, contento pero con una experiencia más (y menos dinero en la cuenta, pero sabíamos a lo que íbamos).

En cuanto a la experiencia de viajar solo, pues la verdad es que tiene sus ventajas, y es que al no tener que coordinarte con nadie puedes ir totalmente a tu pedo e irte inventando y cambiando los planes sobre la marcha. ¿Que quieres parar? Paras. ¿Que quieres ir a ver ese sitio que se ve a lo lejos y está a tomar por culo? Vas. ¿Que a mitad de camino cambias de opinión y haces otra cosa? La haces.

Evidentemente es mejor cuando tienes otra persona con la que compartir el viaje (en este caso una persona concreta y determinada, que ya sabe que lo es, y no hay que dar más explicaciones), pero esto la verdad es que ha tenido su punto. Pensaba que iba a ser más aburrido, o con muchos ratos muertos y nada más lejos de la realidad.

No hay comentarios: