El retorno de la niña Terminator.
Como ya vaticiné al comentar la primera entrega, aunque no hacía falta ser un genio para llegar a esa conclusión, esta franquicia de Blumhouse era carne de secuela, y me atrevo a decir que aún la veremos aparecer más veces por la pantalla grande si funcina bien en taquilla.
Para mi gusto más floja que su antecesora, intenta ir a por el "más y más grande" y se pasa un poco de frenada, ya que en su intento de expandir algo más su universo acaba pasando del terror más o menos doméstico a la acción de superespías y villanos propios de James Bond, con más chistes que sustos. Que tampoco es malo, ojo. Sí se le puede echar en cara que el salto de fe que hay que hacer para creerse la mayoría de las cosas que pasan en la película es excesivo, lo que dificulta la tarea de tomársela en serio. Una cosa es inventarse cosas de supertecnología, pero por Dios, un poco de coherencia no estaría de más.
Tiene también su parte de crítica a los peligros del abuso de las inteligencias artificiales, pero esta crítica queda un poco en entredicho cuando (ojo, spoiler) precisamente el personaje que más incide en esto acaba siendo el villano de la función.
Tiene también su parte de crítica a los peligros del abuso de las inteligencias artificiales, pero esta crítica queda un poco en entredicho cuando (ojo, spoiler) precisamente el personaje que más incide en esto acaba siendo el villano de la función.
¿Me ha gustado menos que la primera? Sí. ¿Iré al cine de cabeza si hacen la tercera? También.
Me hizo mucha gracia, por cierto, la excusa argumental que utilizan para que, igual que la actriz que le da cuerpo, M3gan sea aquí más alta que en la entrega anterior. Simple pero eficaz.
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