domingo, 1 de julio de 2007

28 semanas después: el retorno de los zombies hiperactivos


"28 semanas después" es la segunda parte de la original "28 días después" (y ya me vale, que parece que sólo sé analizar secuelas), una película sobre zombies bastante original porque prescindía del clásico zombi lento y reptante, en beneficio de unos zombies mucho más agresivos y rabiosos, especialmente capaces de correr.

Está claro, un cadáver ambulante, ansioso de meterse tu cerebro entre pecho y espalda, que lentamente se arrastra por el pasillo hacia ti mientras gime, da mal rollito. Si encima tiene los ojos inyectados en sangre, soltando espumarajos por la boca y corre más que tú, pues como que asusta un pelín más.

Ésa era la premisa de la primera película, la infección de Inglaterra por parte de una cepa de un virus de acción ultrarrápida, que convertía a los ciudadanos en esta suerte de cadáver rabioso, y en esta segunda se nos presenta un tema bastante interesante, que es el qué sucede después de la invasión, y la postrera reconstrucción del país.

Obviamente, y como no es de extrañar, hay un rebrote del virus y todo vuelve a suceder, aunque a decir verdad, la causa que origina el rebrote es bastante ridícula y poco creíble. A decir verdad hay muchas cosas ridículas y poco creíbles en esta película, sobre todo por las medidas que toma el ejército para enfrentarse a tan peliaguda situación. Como también resulta ridículo que ante un ataque de gases bacteriológicos los protagonistas se limiten a taparse la boca con un pañuelo y salgan tan campantes. (Ay, si lo llegan a saber los kurdos).

Lo que no me ha gustado de la película es que las escenas de acción son totalmente caóticas, con mareantes bailes de cámara y música machacona que llega a dar dolor de cabeza, con el resultado de que termina la escena y uno no sabe muy bien qué es lo que ha pasado. La técnica como experimento no está mal y para escenas cortas puede quedar bien, pero en mi humilde opinión abusan del recurso y llega a cansar.

En definitiva, nada del otro mundo, pero se deja ver, aunque quitando escenas sueltas, no es una película de zombies al uso, y por su desarrollo y por muchas de sus escenas perfectamente podría haber sido una película bélica. Vamos, que por momentos recuerda más a "Black Hawk derribado" que a "El amanecer de los muertos".

Y especial mención al ejército de los EEUU, que en esta película se dedica a cumplir el propósito con el que fue fundado allá por el siglo XVIII: matar ingleses.

1 comentario:

Anónimo dijo...

dios lo de taparse con la camiseta la boca vaya TRUÑO DE PELICULAAAAAAAAAARGF!!
Dav.