Recitando bertsos para la ETB.
Seguimos reseñando las jornadas, y me voy al sábado por la mañana. Esta se ve marcada por la lluvia y por el encaje de bolillos para intentar distribuir las mesas de juego, aunque lo duro vendría a la tarde, cuando tuve que trucar las leyes de la física, para sacar espacios y mesas de donde no había. El sábado por la tarde Jokin era esa mancha azul que corría de un lado para otro, moviendo mesas y sillas.
Pero el sábado a la tarde trajo también consigo una de las notas más positivas de las jornada, y es que vinieron, como se ve en la foto, periodistas nada menos que de la ETB, para hablar de las jornadas (en el Gaur Egun del domingo), lo que da a las Ómicron una categoría que nunca habíamos tenido.
Pasado el estrés de la tarde, que no fue pequeño, tocaba por fin algo un poco más relajado: dirigir el rol en vivo "El mejor lugar", basado en la maravillosa serie "The Good Place". Y aunque a ratos era un poco caótico, asistí maravillado a algunas actuaciones que eran como ver la serie otra vez.
Terminamos el vivo y toca ir de fiesta, aunque intento no emborracharme demasiado, que el domingo tocaba estar disponible, y pegarse la pechada.
Aunque estaba de guardia, no fue necesario que me levantara antes de las 10, pero fue un día de no parar. Empezar a desmontar, hacer la clausura, despedidas y terminar con el desmontaje, que es un verdadero infierno. Finalmente a eso de las 18 pudimos cerrar el frontón y marchar a Bilbao, donde comimos, casi a las 8 de la tarde.
Y luego a morir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario