Y en euskera, como debe ser.
No se trata de una película, sino de la proyección en cine de los primeros 4 episodios de Dragon Ball Z Kai, que es una versión remasterizada y sin relleno que lanzaron en 2009, y que ahora llega a España, haciendo una parada a modo de presentación en los cines.
Lógicamente no iban a echar de una sola sentada toda la serie (que serían más de 50 horas de metraje), y francamente dudo que vaya a tener la oportunidad de ver en pantalla grande el resto de capítulos, pero el placer de volver un rato a la infancia viendo las aventuras de Son Goku, concretamente el arco de Raditz, en el idioma en el que las vi de pequeño, hace que me mereciera la pena acercarme ayer al cine.
Lo que está claro es que si me equivoco en mi vaticinio y sí proyectan más episodios (soñar es gratis, y con el pase anual la entrada también), ahí estaré sentado en la butaca, con una sonrisa de oreja a oreja.
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