martes, 23 de septiembre de 2008

Ludo Ergo Sum: crónica (versión larga)

Tecno T-Rex

Ayer mencionaba algo del fin de semana, pero como estaba vago no me extendí demasiado, así que echándole morro, haré un remake de mi propia entrada pero en versión larga.

El viernes llegué a Madrid, a casa de Manu, donde me alojé, y allí conocí a su nueva adquisición, Gizmo, un hurón que con sus bailes y sus correteos era la alegría de la casa, y que tenía cierta predilección por intentar meterse en el hueco del Subwoofer.

El sábado, tras cargar el coche con cajas de material para el stand fuimos a las jornadas, donde tras saludar a unos cuántos conocidos jugué una partidilla al Cleopatra, y que por supuesto gané (baja modestia, que sube Jokin).

A la tarde, tras una psicodélica sobremesa en el McDonalds, aderezada de absurdos chistes malos sobre hamburguesas de tíndalos y demás, poca cosa, ya que las partidas previstas se cancelaron por falta de jugadores, y estuvimos esencialmente de charleta hasta las 20:00, que cerraban el polideportivo, así que nos fuimos por ahí de bares.

La noche acabó resultando un poco rara. Ya fue curioso volver a encontrarnos con Marina, una chica que conocíamos de jornadas, y a la que no habíamos visto en años (diría que desde las Ecares de 2001), y bastante más raro fue encontrarnos luego a la noche con el ex-novio de Marina, al que tampoco habíamos visto en años, y que además tenía exactamente el mismo aspecto que entonces (Ángel lo definió como el fantasma de las Malasañas pasadas).

Pero no acababan ahí las cosas raras, ya que en un momento dado Paco propuso ir a una fiesta que le habían invitado, y allí fuimos. Como adelanté ayer, era una fiesta de una agencia de publicidad o algo, y la fiesta era en las propias oficinas, y ahí acabamos, bebiendo el agua de los floreros (porque el ron, el whisky y el vodka se habían acabado) y no menos sorprendente fue encontrarnos a Susana, otra habitual de jornadas, pero que ya era casualidad ver ahí (el fantasma de las Malasañas presentes, en palabras de Ángel, y eso que la oficina estaba en la Puerta del Sol). La psicodelia era tal, que acabé bebiendo cerveza, y mira que la odio. Una noche rara-rara, que se volvió más rara cuando Paco, que era el que nos había llevado a la fiesta se marchó al de 15 minutos a acompañar a la novia a casa, prometiendo que volvería, y dejándonos ahí solos, rodeados de gente desconocida. Lo sorprendente es que volvió. Y allí estuvimos dándole a la bebida hasta que Paco decidió que mis pantalones tenían sed, y hábilmente derramó el último vaso sobre mi persona, con lo que acordamos que el Karma daba por terminada la fiesta.

Aun así, aún quedaban cosas raras por pasar, ya que volviendo del baño vimos el mecanosaurio de la foto, que se activaba por control remoto, con el que se puso a juguetear Manu, y apareció una rubia que primero preguntó si estábamos en la cola del baño. Al responder que no, dijo que éramos unos jugones (por lo del mando del dinosaurio) y sin venir muy a cuento nos dijo "mi hermana es tester". Ante nuestras miradas de estupefacción repitió "mi hermana es tester". Y luego se dio la vuelta y se fue. (¿El fantasma de las Malasañas futuras, tal vez?) Y ya de ahí nos fuimos, que el cuerpo no daba para más, y tocaba madrugar al día siguiente.

Madrugar se hizo duro, pero teníamos unas jornadas que mantener, y sobre todo había un stand que atender, así que a las 9 de la mañana, no sin esfuerzo, nos levantamos. Por la mañana poca cosa, y ya a mediodía, casi a la hora de comer, empezó el vivo de Monkey Island, que como ya adelanté, fue bastante divertido, con escenas totalmente Monkey Island, como aquella en la que alguien dijo "ese mapa debería estar en un museo", me giré y hablando a la nada declamé "Pero esa frase es de otro videojuego de LucasartsTM", o el maravilloso duelo de esgrima con insultos contra la Gobernadora Marley... para defender a la Gobernadora Marley. Y de cómo mi personaje tenía de profesión "tipo misterioso" y me pasé la partida jugando al despiste y siendo exagerada y deliberadamente misterioso.

Para acabar, presenciamos con horror en casa de Manu la película "Alterado", una película del director de "El proyecto de la bruja de Blair", o de cómo una idea interesante se puede convertir fácilmente en un petardo de película, así como intentamos ver Rise, una de vampiros cuyo único aliciente era ver a Lucy Liu en ropa interior.

Por lo demás, un saludo a todos los frikis que me encontré en las jornadas, y en especial a Apo y Paula, que también fueron desde Bilbao a tan canijas jornadas.

3 comentarios:

Eduardo Vélez dijo...

Igual es un comentario un poco peligroso, pero ¿no ha habido aquí en algun momento un artículo sobre cierta "Agrupación de Amplio espectro de creadores de obras con protección de derechos de creación de nuestro estado"?

Si ha sido suprimido por alguna razón ignota (algún tipo de amenaza) ¿sería posible leerla en el correo? Gracias.

Jokin dijo...

¿Te refieres a esto?

http://elverdaderojokin.blogspot.com/2008/06/propuestas-de-canon.html?showComment=1214413200000

Eduardo Vélez dijo...

Si, me refería a esto, parece que el google me ha hecho algo raro y me cargó una versión antigua del blog y pensé que era un artículo reciente. Muchas Gracias.