Hoy me voy de Gobierno Vasco, dejo la viceconsejería de Turismo para incorporarme mañana a la Diputación Foral de Bizkaia, más cerquita de casa, sueldo presumiblemente más alto y trabajar solo por las mañanas. Todo son ventajas, pero las cosas buenas tienen también su lado malo, y el lado malo es tener que separarme de los que durante estos 6 meses han sido mis compañeros, un grupo donde he tenido la suerte de poder verme integrado desde el primer día, y donde espero haber dejado un buen recuerdo como profesional, si es posible, pese a mis innumerables meteduras de pata, y sobre todo como persona, pues profesionales somos 8 horas al día, pero personas lo somos durante las 24.
El tiempo que he estado en Vitoria, salvo los viajes en autobús, los madrugones infernales y tener que comer todos los días fuera de casa, ha sido muy agradable, y además es bastante simbólico, puesto que este blog nació el día que tuve la noticia de que iba a trabajar en la sede de Gobierno Vasco, así que podríamos decir que este blog hoy se ha hecho mayor.
La vida es una carrera de fondo en la que vamos quemando etapas, y siento que hoy ha terminado una etapa que ha sido muy gratificante en lo personal y en lo profesional, y confío en que la que empiece mañana lo sea igualmente.
Un saludo muy especial, además de mis compañeros de departamento, con quienes he estado encantado de compartir la comida de hoy, a los integrantes del "Comando OPE", el grupo de gente con los que coincidí la primera vez que trabajé en Gobierno Vasco y a quienes el destino unió de nuevo en Lakua, y que poco a poco nos hemos ido separando de jnuevo, pero la vida da muchas vueltas y nunca se sabe cuándo volveremos a juntarnos.
Puede que la entrada de hoy sea un poco pastelosa, pero bueno, tengo 364 días al año para ser un cachondo mental y no está de más que de vez en cuándo me ponga poético, así que esta entrada va dedicada a todos aquellos que en uno u otro momento han contribuido a que mi estancia en la Viceconsejería de Turismo haya sido tan positiva.
3 comentarios:
Me ha gustado la frase de "profesionales somos 8 horas, pero personas 24"... curiosamente a mi me pasa lo contrario... ¡casi diría que no soy persona ni 8 horas al día!
al final es lo que la gente recuerda; cómo eras con ellos y cómo eran ellos contigo
Ya veo que tu carrera como funcionario va viento en popa :-))
Pues precisamente el Jueves estuve en Vitoria, y a la vuelta, sin saber a que hora volvías, estuve mirando por si te subias, pero como me imaginé ya te debías haber vuelto para las 6 que volví yo.
A ver que tal te va en el nuevo curro, ya nos contaras
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