Dreamworks nos regala (es un decir, que la entrada te la cobran) una película con una historia simple, unos tropos nada originales y un planteamiento casi formuláico, pero tan bien hecha, tan preciosa en lo visual y con tanto mimo en los detalles que el resultado merece muchísimo la pena.
La Unidad ROZZUM 7134, apodada "Roz", es un robot doméstico que se pierde y aterriza en mitad del bosque, con los animalitos, y tras una serie de situaciones cómicas se encuentra con un huevo de ganso, y cuando nace el pollo se ve obligada a adoptarlo y cuidarlo hasta su adultez. Nada que revolucione la narrativa, pero llevado a cabo con una ternura, y tan lleno de momentos divertidos, que es imposible no mirar la pantalla embelesado. Por el camino se irá encontrando con una serie de personajes a cuál más entrañable, que darán empaque a la película.
Por lo demás los tropos que cabría esperar de superación, amor, la familia es la que te haces, sé lo que quieras ser y no lo que esperan que seas... nada novedoso, es verdad, pero no era esa su apuesta. Apuesta por contarnos una historia bonita, visualmente epatante (especialmente vistosa es la escena en la que el zorro le cuenta un cuento al pequeño ganso) y divertida.
Una joyita.
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