Johny y River.
¿Quién dijo que los videojuegos no pueden ser arte? Firebird Games nos demuestra lo contrario con To the Moon, una preciosa y entrañable historia disfrazadada de RPG, en el que dos médicos tienen que entrar en la mente de un paciente ya anciano, y viajar a través de sus recuerdos para que este pueda hacer realidad su último deseo: viajar a la Luna.
Así, iremos viendo cómo el juego nos cuenta la historia de Johny (que es como se llama el anciano), en escenas en las que el juego rebosa humor y ternura por los 4 costados, viendo sobre todo la gran historia de Johny y su querida River, siendo imposible no acordarse de los entrañables Carl y Ellie de "Up!". Y no, la comparación no es exagerada, de verdad.
El juego es cortito (apenas 4 horas y pico) y es ridículamente sencillo, hasta el punto de que es más una película interactiva, con puzzles absurdamente sencillos y escenas de "acción" que no suponen ningún reto. Pero ni falta que hace, dado que lo importante es emocionarse con la historia de Johny, y reírse con las andanzas de los doctores Eva Rosalene y Neil Watts (por cierto, merezco una colleja, por no caer en la referencia de "Neil" hasta casi el final del juego). También es bastante sencillo en cuanto a sus gráficos, que recordarán inevitablemente a los juegos tipo RPG de la era dorada de la SuperNintendo. Pero tampoco necesita más, y lo cierto es que además ese estilo tan naif le ofrece una imprescindible ración de monería sin la que el producto perdería sentido.
Y otro apartado es la música, una música de piano que parece hecha para arrancar sentimientos directamente del corazón. Y es que tengo que admitir que hace apenas media hora que me he terminado "To the moon", y todavía estoy con la lagrimilla. Confieso que mi nivel de lloriqueo con este juego ha alcanzado los niveles de "Toy Story 3"
El juego es cortito (apenas 4 horas y pico) y es ridículamente sencillo, hasta el punto de que es más una película interactiva, con puzzles absurdamente sencillos y escenas de "acción" que no suponen ningún reto. Pero ni falta que hace, dado que lo importante es emocionarse con la historia de Johny, y reírse con las andanzas de los doctores Eva Rosalene y Neil Watts (por cierto, merezco una colleja, por no caer en la referencia de "Neil" hasta casi el final del juego). También es bastante sencillo en cuanto a sus gráficos, que recordarán inevitablemente a los juegos tipo RPG de la era dorada de la SuperNintendo. Pero tampoco necesita más, y lo cierto es que además ese estilo tan naif le ofrece una imprescindible ración de monería sin la que el producto perdería sentido.
Y otro apartado es la música, una música de piano que parece hecha para arrancar sentimientos directamente del corazón. Y es que tengo que admitir que hace apenas media hora que me he terminado "To the moon", y todavía estoy con la lagrimilla. Confieso que mi nivel de lloriqueo con este juego ha alcanzado los niveles de "Toy Story 3"
Vaya, que lo recomiendo sí o sí a todo el que disfrute al menos un poco con los videojuegos y no sea un psicópata sin alma.
Trailer (aunque yo recomendaría jugarlo a ciegas, sin saber nada)
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