En marzo cumpliré ya 15 años sin coche y la verdad es que nunca he sentido necesidad de volver a tener uno. En consecuencia he conducido muy poco (las veces que he usado uno de alquiler), y concretamente llevaba un par de años sin ponerme al volante. Así que me vino muy bien este curso de conducción eficiente que nos ofrecían en el trabajo (es lo que tiene ser el parque móvil), que no era de conducir, se supone que eso ya sabemos, sino de conducir gastando menos combustible.
El primer día empezamos con la práctica, haciendo todos el mismo recorrido, muy "examen de conducir", por la zona de Derio, Santo Domingo y tal. Luego nos decían el consumo realizado (en mi caso reconozco que, por culpa de la falta de práctica, más elevado de lo que debería y nos íbamos a la clase teórica, sobre señales nuevas de tráfico (que estas cosas han cambiado mucho desde que me saqué el carnet), que se hizo bastante ameno, hay que decir.
El segundo día volvimos allí y tocó otra teórica, esta más pesada, sobre combustión, motores y maneras de reducir el consumo, pero es a lo que habíamos ido. De ahí nuevamente al coche, a repetir el recorrido del día anterior y ver la diferencia de consumo entre una sesión y otra. En mi caso fue bastante satisfactorio, ya que al tener margen de mejora generoso, la reducción fue cercana al 25%.
¿Me acordaré de todas estas cosas la próxima vez que me toque conducir? Vaya usted a saber, pero lo que está claro es que al menos no estaré tan oxidado.
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