sábado, 12 de enero de 2008

La Búsqueda: el Diario Secreto

Lo de los mecheros en los conciertos se les quedó pequeño.

Benjamin Gates es un gran buscador de tesoros, miembro de una prestigiosa familia americana, pero un día aparece un señor y trae pruebas que incriminan a su tatarabuelo en el asesinato de Lincoln.

Para demostrar la inocencia de su ancestro, Gates se rodea de sus amiguetes y se dedica a pasearse por el mundo en busca de la legendaria ciudad de oro de los Olmecas, todo muy normal, mientras el malo, que no es otro que el tipo que ha manchado el nombre de su abuelo, y que también quiere el tesoro, se dedica a seguirles, al más puro estilo villano de Willy Fogg.

Y bueno, con este argumento nos cuelan una película de aventuras, pero me pregunto yo. ¿es necesario para que una película de aventuras sea para todos los públicos, que suponga un insulto a la inteligencia humana?

Porque, vamos a ver. Una cosa es que el personaje de Cage sea el héroe, y que sepa hacer de todo y todo bien, que sea capaz de colarse en el Palacio de Buckingham, en la Casa Blanca, en una fiesta privada del presidente de los EEUU... pero es que hay cosas que lo siento pero no, me rechinan demasiado.

Lo de "me salto un semáforo para que me saque una foto de esta tablilla de siglos de antigüedad, tiro la tablilla y si eso ya hackeo los archivos de la policía para conseguir la foto y traducir la tablilla de ahí" es una de las cosas que me mató. Una cosa es que el realismo haga sus concesiones en pos del dinamismo, pero lo de esta película es excesivo, ya que se dan situaciones que no tienen ni pies ni cabeza.

El propio diario al que hace referencia el título, es el mitológico libro de los presidentes de los EEUU, donde se supone que viene un montón de información secreta, así que para leerlo, nada como colarse en el cumpleaños del presidente, secuestrarlo, hacerse coleguita de él y sacarle la información, y no importa que lancen a todo el FBI a buscarte, ya que un pivote es toda la medida de seguridad que te vas a encontrar.

El argumento, además, tiene alguna que otra cosa bastante absurda (sin tener que entrar en las docenas de cutreclichés que utiliza) siendo la más gorda la que sirve de hilo argumental. Para rebatir las pruebas que incriminan a su antepasado no tiene otra cosa que hacer que buscar un tesoro y demostrar su inocencia. ¿A quién?

A mí desde luego, lo único que me demuestra es que había un tesoro, no que su tatarabuelo fuera inocente.

Luego está el tema de las patadas a la Historia, inevitables en este tipo de películas, siendo garrafal que la ciudad de los Olmecas esté situada en el Monte Rushmore, que viene a ser como plantar una ciudad Sumeria a las afueras de Oslo.

¿Y qué decir de esa gran perla cultural, cuando alguien dice feliz "eso es precolombino, debe de tener por lo menos 500 años"?Que alguien haga el favor de explicarles que precolombino no significa "anterior a Colombo".

En fin, que esta película es un patinazo y deja abiertos muchos enigmas, siendo el más importante el de "¿por qué he pagado por ver esto?"

1 comentario:

Ali dijo...

absolutamente de acuerdo, xD
(Soy Alicia, creo que solo conoces una O_o)