La experiencia (aunque ya lo había probado años atrás en Logroño) fue muy divertida, con su sensación de velocidad, tomar una curva a toda hostia y evitar pegarte la ídem, los adelantamientos... El único pero, que tiene toda la pinta de que están acostumbrados a tratar con clientes niñatos y que van a hacer el chorra, sobre todo el que estaba en control, que después de que yo perdiera el mismo en una curva y me chocara, me viene y me dice, como quien regaña a un niño "primer aviso, al segundo te vas a la calle". Igual se cree el muy gilipollas que me choco porque me apetece ¬¬
Pero lo malo no es solo eso, sino que al acabar la carrera le dije que su actitud me había molestado, y no se bajaba de su chulería, y no era capaz de entender que no puedes tratar a clientes adultos que respetan las normas igual que a críos que van a hacer el tonto, porque no es que me regañara a mí, es que lo hizo con todos, y en parecidas circunstancias. Así que muy divertida la experiencia, pero si repito karting será, a poder ser, en otro sitio.
viernes, 26 de junio de 2009
Karting
Ayer me fui con unos amigos a la pista de karts de Ballonti (Portugalete), y diría que a echar unas carreras, pero sería más acertado decir que yo iba a conducir un kart (y por conducir me refiero a "chocar el menor número de veces posible") mientras mis amigos echaban carreras. Y es que pasar de 100 kilos es lo que tiene, que salvo en cuesta abajo, el minibólido sufre.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario