Esta inocentada tuvo menos gracia.
Ayer habría tocado la crónica del fin de semana, pero para una tradición navideña que me gusta, que es la de las bromas del 28 de diciembre, había que respetarla.
Pero ahora vamos al viernes, que como ya dije trabajé, pero me fui pronto. Aproveché para ir a comer a Megapark y por la tarde una sesión de Clank! Legacy, donde sí consigo ganar (me tocará llevar galletas a la próxima). Luego unas partidas al nuevo The Gang (un póker cooperativo) y por la noche al cine, donde veo Anaconda.
El sábado por la mañana lo dedico a jugar a The Witcher 3 (yo siempre a la moda) y por la tarde a Barakaldo, donde la asociación Golem montaba un día de puertas abiertas. Voy, enseño a jugar a Darwin´s Journey, jugamos y marcho.
Domingo por la mañana, lo mismo que el sábado pero hago masa galletera, que mañana toca Seafall. Por la tarde a Miribilla, donde Bilbao Basket juega muy bien pero no es suficiente para desenmarañar la tremenda defensa del Barça, que se acaba llevando un partido muy peleado. Luego un paseo con mi señora novia, cena de tacos y a casa, donde pongo a hornear las galletas.
Y hoy lunes la felicidad de no tener que madrugar hasta el 7 de enero.
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