lunes, 31 de enero de 2022

Matrix Resurrections

John Wick meets The Matrix.

No es ningún secreto que soy de esas personas a las que no les gustó nada Matrix. Pero ya solté en su día toda mi verborrea contra esa película y hoy no vengo a hablar de la primera entrega, sino de esta nueva en la que, 18 años más tarde, Keanu Reeves y Carrie Ann-Moss vuelven a ponerse la chupa de cuero y las gafas de sol para repartir estopa a agentes trajeados. 

Pues bien, me ha gustado muy poco, casi diría que menos que la original. Pero esta vez voy a tratar de hacer una crítica respetuosa y razonada de por qué no me ha gustado, pues no considero tanto que sea una mala película, sino que simplemente no era para mí, y por eso no le pude entrar al juego y me aburrí como una ostra viéndola.

Creo que es una película muy dirigida a la gente que en su día disfrutó y amó la película, y se ve en sus guiños y homenajes, llegando en ese sentido al principio de la película a ser una gamberrada casi autoparódica (en realidad la única parte de la película que me gustó), pero creo que de alguna manera busca transmitir al espectador las mismas sensaciones que cuando vio Matrix por primera vez. Conmigo hay que decir que eso lo consigue con creces. Claro que eso, dado lo que opino de Matrix, está lejos de ser positivo.

Lo dicho, no consiguió ilusionarme con sus peleas, no despertó mi interés con su historia y no me emocionó la historia de Trinity y Neo. Pero no me voy a quejar de eso, pues sería como si alguien a quien no le gusta la verdura se queja del menú de un vegetariano. Esta película quita las partes que más o menos me gustaban de Matrix, se ciñe en las que no me gustaban y me las tira a la cara.

Dicho eso, van un par de críticas que sí que van un poco más allá del "a mí" no me ha gustado y que creo que son aspectos mejorables, al menos en mi opinión.

Por una parte creo que se echan en falta, y mucho, las peleas con el estilo tan característico de la casa, y muchas escenas de acción quedaban muy como de película de acción genérica. Matrix marcó un estilo en lo visual, y renunciar a eso creo que es un error. Entiendo que han querido innovar y que no pareciera un refrito, pero cuando el resto de la película lo es un poco, creo que deberían haber mantenido eso. 

Tampoco me gustan algunos reemplazos en el reparto y se notan mucho las ausencias de Lawrence Fishburne y Hugo Weaving, y aunque Yahya Abdul-Mateen mantiene más o menos el tipo como Morpheo, Jonathan Groff no llega ni a la suela de sus zapatos a su antecesor como agente Smith.

Diría también que se me hizo demasiado larga, y que al de una hora de película ya estaba mirando el reloj. Pero nuevamente, eso entra más en el terreno de lo subjetivo, pues estoy seguro de que habrá quien haya disfrutado pegando saltos en la butaca del cine con los tiros, las patadas y las persecuciones y se le ha hecho corta. 

En cuanto a la parte de la historia y el argumento, pues bueno, ¿ya he dicho que en esta entrada iba a tratar de ser objetivo y respetuoso, verdad?

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