Versión 2012/13
Con el final del verano no todo lo que viene es negativo. Es cierto que se acaban los días de sol, empieza a llover, los días son más cortos y vuelven las tardes en la oficina. Pero el nuevo curso también implica que toca retomar el teatro, y ayer fue la primera clase.
Como es lógico pensar, había ganas ya de retomar la actividad, y la clase de ayer fue muy divertida, con reencuentros y caras nuevas. Fue muy divertido, tanto que hace que sea llevadero el ritual de los lunes de salir de casa a las 7:30 y no volver a verla hasta las 22:15.
Comienza un nuevo curso de teatro, con ganas de mejorar, aplicando las cosas aprendidas el año pasado y añadiendo las que aprenda este, que todavía es mucho lo que tengo por aprender y mejorar. Y el objetivo es doble: uno es hacer bien la obra en junio y otro, no menos importante, disfrutar del camino que nos lleve hasta ella.
No hay comentarios:
Publicar un comentario