Icono muy reconocible.
Hoy empiezan oficialmente mis vacaciones navideñas (bueno, técnicamente el lunes), que durarán hasta enero, hasta después de reyes. Y han empezado con algo muy de estas fechas: comilona con los del trabajo, con una sobremesa que se ha prolongado hasta bien entradas las 7 de la tarde.
Ahora dos semanas largas, casi 3, sin madrugones ni expedientes ni llamadas, ni mostrador... aunque a cambio todos los compromisos navideños, algunos de los cuáles apetecen, otros quizás (como la nochevieja) no tanto.
Pero está bien lo de no tener que ir a trabajar.
No hay comentarios:
Publicar un comentario