Leticia Dolera y George R. R. Martin.
Ópera prima de Leticia Dolera en la dirección, que dirige y protagoniza una película en la que se mete en la piel de María de las Montañas, una treintañera incapaz de encontrarse a sí misma y que después de ser rechazada en su enésima entrevista de trabajo se plantea qué es lo que necesita para ser una persona normal, y por tanto feliz: un trabajo, una casa, una pareja, vida social, aficiones y vida familiar, ya que se da cuenta de que carece de todas esas cosas, pues es más rara que un perro verde.
Así, se lanza a la búsqueda de esa normalidad y conoce a Borja, un obeso dependiente de Ikea, con quien inicia una bonita relación de amistad pagafantismo, en la que él le ayuda a ella a ser normal y ella le ayuda a él a adelgazar. El final, con un toque muy Amelie, resulta previsible, aunque un tanto irreal, pero la película es simpática y se deja ver, ya que en ningún momento aburre. Y la adorabilidad de Leticia Dolera ayuda mucho en este punto.
Típica película buenrollista que, sin ser nada que vaya a revolucionar el género, deja buen sabor de boca.
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