Escenario ficticio del viernes.
Con ese título es fácil deducir qué hice el viernes a la tarde-noche. En efecto, jugar a rol, juntándonos para probar la partida de rol en vivo, obra de la amiga Anize, inspirado directamente en el diario de Ana Frank, y tomando prestado el sistema de mi vivo "7 años y un día". Al acabar el vivo tocó ir de pintxo-pote por Somera (más pintxo que pote, y más pizza que pintxo).
El sábado por la mañana una de peluquería, que ya tocaba y por la tarde más rol, ya que eran Campos de Marte y me tocaba dirigir. Llevé otra vez la partida del Ministerio del Tiempo. Como anécdota, uno de los jugadores era la primera vez que probaba el rol, y pudo hacer lo que seguramente nadie más habrá hecho: jugar su primera partida de rol llevando como personaje a Jordi Hurtado.
Acabada la partida nos fuimos, bajo la lluvia pero con coche, a cenar a Zubiarte, donde estuve instruyendo al resto de comensales sobre el mundillo de las oposiciones (todo lo que sea ayudar a la gente en este sentido, yo encantado).
Y hoy domingo, mañana de asueto y tarde de cine, con una película cuyo título casaba muy bien con las lluvias de este fin de semana: La forma del agua.
No hay comentarios:
Publicar un comentario