Muchas veces hablo aquí de cosas insólitas que me suceden en el mostrador, de cosas surrealistas que resultan graciosas, y que muchas veces son obra de la cazurrez de quien viene. Pero hay veces en las que el cazurro resulto ser yo, y al igual que Casillas ha sacado un vídeo con sus cantadas, procedo esta vez a hacer leña de mí mismo, con este divertido error que cometí ayer, culpa sin duda de ir tan acelerado y a piñón fijo.
Muchas veces sucede que los usuarios vienen a por un certificado, y de esas muchísimas, van primero al registro a por un certificado que les dan allí, y luego vienen, reenviados, a por el nuestro. Es cierto que hay mucho listillo que intenta hacer la jugada de pasar por el registro, para que les reenvíen a donde nosotros e intentar saltarse el sistema de cita previa. Pero ayer no fue el caso.
Estaba yo ayer en el mostrador, cuando vino una persona, que venía con unos certificados de registro en la mano, pero sin número.
-Tienes que coger número.
-Ya, es que vengo de registro.
-Me parece muy bien, pero tienes que coger número.
-Sí, sí. Que vengo de registro.
-Vale, pero tienes que esperar a que salga tu número en pantalla.
-Es que yo vengo de registro, y...
-Que sí, pero que te esperes, que ya saldrá tu número.
-No me estás entendiendo, que vengo de registro, porque trabajo en registro.
Diré en mi defensa que esa persona llevaba poco tiempo trabajando, pero eso no excusa que me colé. Por suerte, se lo tomó a bien, y no pasó de ser algo meramente anecdótico.
Y bueno, que a veces es bueno reírse de los errores propios, sobre todo cuando no tienen consecuencias.
Muchas veces sucede que los usuarios vienen a por un certificado, y de esas muchísimas, van primero al registro a por un certificado que les dan allí, y luego vienen, reenviados, a por el nuestro. Es cierto que hay mucho listillo que intenta hacer la jugada de pasar por el registro, para que les reenvíen a donde nosotros e intentar saltarse el sistema de cita previa. Pero ayer no fue el caso.
Estaba yo ayer en el mostrador, cuando vino una persona, que venía con unos certificados de registro en la mano, pero sin número.
-Tienes que coger número.
-Ya, es que vengo de registro.
-Me parece muy bien, pero tienes que coger número.
-Sí, sí. Que vengo de registro.
-Vale, pero tienes que esperar a que salga tu número en pantalla.
-Es que yo vengo de registro, y...
-Que sí, pero que te esperes, que ya saldrá tu número.
-No me estás entendiendo, que vengo de registro, porque trabajo en registro.
Diré en mi defensa que esa persona llevaba poco tiempo trabajando, pero eso no excusa que me colé. Por suerte, se lo tomó a bien, y no pasó de ser algo meramente anecdótico.
Y bueno, que a veces es bueno reírse de los errores propios, sobre todo cuando no tienen consecuencias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario