Sir Jokin
Ayer hablé de los Carnavales de años anteriores, pero no hablé de 2014. Eso lo voy a hacer ahora, y es bastante evidente cuál fue mi disfraz; este año no había preparado nada, y ya que teníamos comida de txoko del grupo de teatro, aproveché para comprar un disfraz de caballero medieval, pues esa será mi indumentaria cuando representemos La Venganza de Don Mendo.
Nos juntamos los componentes del grupo y nos fuimos a un txoko en Gatika, donde nos pusimos hasta las patas de comer, beber y bailar, e incluso hubo espacio para ensayar la obra del sábado que viene (Zapping: una prosopopeya genérica), y la comida salía hasta por las orejas.
Ya de regreso a Bilbao, anduvimos sobre todo por el Azkena, primero con mi señora novia y sua amigas, y después con un grupo de Lemmings que decían ser la gente de Arbolantxa. Y hasta más o menos las 3 aguanté, cuando la lluvia y mis pies decidieron que ya no podía más.
Oh, no, more lemmings!
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