La foto permite ver los amplios registros faciales de Laia Costa.
Decepcionante thriller que no hace justicia a la buena pinta que tenía. Con un planteamiento prometedor pero una resolución sacada del cajón de los clichés y unos actores que no terminan de tomarse en serio la película, pero en especial Laia Costa, que nos regala una de las peores interpretaciones que me haya topado en mucho tiempo en el cine, con su voz monocorde y su perpetua cara de susto/no entiendo las cosas durante toda la película, fuera cual fuera la situación.
Esto va de unos hermanos que guardan un turbio secreto de familia, años atrás enterrado y que sale a la luz cuando al fallecer el padre reciben una importante oferta económica por la casa paterna. Uno quiere vender pero el otro no, y la decisión supone desenterrar raíces muy profundas y oscuras.
Podría dar de sí pero el resultado es cuando menos mediocre, con algunas cosas que se van viendo venir desde lejos, unas que solo les falta explicar con marionetas y otras que no es que las dejen en el aire, es que se las traga la trama (¿por qué no hay fotos de la madre?).
Floja, a veces cansada, con un final excesivamente abrupto y... Laia Costa.
No hay comentarios:
Publicar un comentario