Por ahí estoy yo.
Voy a hablar de las partidas que dirigiré en las jornadas, que aunque ya lo hice aquí, hoy no va tanto de las partidas, sino de pequeñas cosas que, aunque sean costumbre, hacen ilusión y no hay que dejar de valorarlas.
A cualquiera que esté un poco al día sobre el rol en España le sonará sin duda el nombre de Nosolorol, editorial que se ha ido convirtiendo por derecho propio en todo un referente nacional en el sector, y es un poderoso patrocinador de infinidad de eventos lúdicos, entre los que hay que destacar las Tierra de Nadie y las Rolea, dos de los eventos roleros más importantes del país.
A mí todo esto me hace especial ilusión en parte porque aunque no formo parte de la editorial, dada la buena amistad que me une con algunos de sus componentes, es un proyecto que he visto crecer, desde que era una cosa de amiguetes hasta lo que es hoy. Y porque tengo la suerte de poder acudir como colaborador de Nosolorol a este tipo de eventos, y compartir cartel con algunos de los grandes talentos roleros, creadores de muchos juegos. Es verdad, como decía al principio, que esto no me es nuevo, que llevo ya muchos años yendo a TdN como colaborador de Nosolorol (y que espero que siga siendo así mucho tiempo), pero no hay que dejar que la habitualidad haga perder la perspectiva de las cosas.
Si hace 20 años me hubieran dicho que podría colaborar en eventos importantes de una de mis aficiones favoritas, con una de las empresas más importantes, me habría dado un patatús. Así que, en justicia, aunque esto sea algo felizmente rutinario, hay que saber reconocer las cosas y no dejar de ilusionarse por ellas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario