Mia Goth vuelve a ser Maxine Minx.
Aunque es visible sin haberla visto, esta película es secuela directa de X, (la del slasher con actores porno). Aquí han pasado 6 años y la superviviente de aquella, Maxine, vive en Hollywood, donde aspira a dejar el porno y convertirse en una estrella del cine convencional. Pero de fondo está el tema de un asesino en serie que atemoriza a la comunidad.
Recreando de manera genial ese punto colorido de los 80 más horteras, con todos los excesos y el glamour hortera de aquel Hollywood, Maxxxine cambia completamente el registro con respecto a X, siendo sobre todo el viaje de la protagonista por ese mundillo, recordando mucho a películas como Lo que esconde Silver Lake o el tercio final de Érase una vez en Hollywood, con todo ese trasfondo de ricos haciendo cosas chungas de ricos.
Al igual que X, Maxxxine no está exenta de escenas truculentas y vísceras, con momentos que visualmente impactan, jugando con lo inesperado. El arco final puede ser tal vez algo más atropellado, con una resolución un poco porque sí, pero no llega a lastrar una película en la que lo importante no es el qué sino el cómo.
Me ha gustado.
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